Alcaraz, contra Jannik Sinner con “ganas” de revancha
Tras ganar a Cilic en cinco sets, el murciano se mide en cuartos con el italiano (03:00, Eurosport), que le ha ganado en sus dos últimos enfrentamientos.
“Los partidos anteriores influyen positivamente, le tengo ganas. Perdí las dos últimas veces contra él y soy un chico competitivo. Al no haberle ganado entonces, quiero volver a enfrentarme a él, para mostrar mi nivel, mi juego e ir a por todas. Ojalá que, a la tercera, vaya la vencida”. Con ese espíritu tan combativo encara Carlos Alcaraz, su partido de cuartos de final del US Open en la madrugada del miércoles al jueves (sobre las 03:00, Eurosport) contra Jannik Sinner. El italiano le venció este mismo año en octavos de Wimbledon, sobre hierba, y en la final de Umag, en tierra batida. Este es su cuarto enfrentamiento. En el primero, el año pasado en el Masters 1.000 de París 2021, se impuso el murciano con claridad en segunda ronda.
Alcaraz llega a la cita después de vencer en cinco sets (6-4, 6-4, 3-6, 6-4, 4-6 y 6-3) a Marin Cilic, campeón del torneo en 2014, en un partido que finalizó a las 02:23 hora del Este en Nueva York. El murciano lució su capacidad de sufrimiento y la resistencia que le hacen muy difícil de batir, ante un rival, el croata de 33 años, curtido en mil batallas, que tiene un balance de 34-20 en partidos a cinco mangas. No se le dan mal al español, que acredita un 6-1, con una única derrota en el pasado Open de Australia contra Matteo Berrettini y triunfos en Wimbledon 2021 (Uchiyama), US Open 2021 (Tsitsipas y Gojowzcyk), Roland Garros 2022 (Ramos) y US Open 2022 (Cilic). “Había que creer en uno mismo. Sabía que iba a tener mis oportunidades y que tenía que estar ahí, empujando y manteniendo el nivel. Y lo hice”, expresó Carlitos.
El hecho es que el prodigio de El Palmar es un hueso duro de roer, porque disfruta también en los momentos duros. En su encuentro contra Cilic, el balcánico le hizo un punto de mucho mérito al sacarse de encima un tiro a bocajarro cerca de la red y Alcaraz, tirado en el suelo, sonrió. En eso es muy distinto a su próximo oponente, Sinner, un chico bastante frío pese a sus 21 años, medio austriaco y criado en la zona sur italiana del Tirol. “Tengo que estar preparado para la batalla. Va a ser muy duro para mí”, avisa Carlitos, que ayer no se entrenó en el Billie Jean King Center. Se había acostado sobre las 04:00 de la madrugada. A veces se ejercita en el hotel.
Propósito de enmienda
Sinner tuvo problemas para deshacerse del lituano Ilya Ivashka, que le plantó cara y forzó el quinto set (6-1, 5-7, 6-2, 4-6 y 6-3 en 3 h:48). “Contra Alcaraz tengo que subir el nivel, sacar bien y restar con suficiente agresividad. Hoy (por el lunes) no sentí la pelota”, reconoció Jannik, 13º del mundo. “Trataré de resolver el partido lo más rápido posible”, avanzó con optimismo. La suya con Alcaraz es una rivalidad que va para clásica, entre los dos jugadores con mayor proyección de la NextGen, llamados a pelear por los Grand Slams.