La ‘peor’ victoria de Sinner

Si uno simplemente mira el marcador, podría pensar que, este sábado, Jannik Sinner debutó de forma plácida en el Masters 1.000 de Shanghái, donde defiende título. El italiano de 24 años, que en tercera ronda (este domingo) se medirá con el holandés Tallon Griekspoor (29 años y 31º), superó al alemán Daniel Altmaier (27 y 49º) por un doble 6-3 en 1h38, pero fueron 98 minutos de sufrimiento. El actual número dos del mundo, que no tuvo fuerzas ni para celebrar, acusó las condiciones del torneo chino (calor y humedad) y, en muchos momentos, pareció mareado y hasta con ganas de vomitar. En cada descanso, aprovechaba para refrescarse con toallas heladas. Su camiseta estaba contantemente empapada (mucho más que la de su rival) y su tenis, a un nivel lejano del óptimo. Pero no necesitó más. Así son los genios.

“Sabía antes del partido que sería muy difícil. No tuve mucho tiempo para adaptarme. Cada día, cada rival es un reto. Estoy muy contento de haber superado el partido. Espero poder subir mi nivel mañana. Estoy muy contento de estar de vuelta. Tengo muy buenos recuerdos aquí”, dijo Sinner a pie de pista, aún recuperando el aliento. “Sí, todo es diferente. Hay mucha más humedad. Aquí se siente mucho más físico… Intenté descansar. Es muy difícil después de ganar un título. Hay que encontrar un buen equilibrio entre los entrenamientos y también sentirse bien físicamente. Ahora la prioridad es sentirme lo mejor posible para el próximo. Hay que jugar con mucha energía”, añadió sobre la diferencia de condiciones con Pekín, donde se proclamó campeón hace tres días.

“El calendario es el que es”, como dijo el propio Jannik en la previa del torneo, y con ello lidió desde casi el principio contra Altmaier, que se fue creciendo con el paso de los minutos. Lo que veía al otro lado de la pista, un lenguaje corporal tremendamente negativo, invitaba a ello. Y se revolvió en varias ocasiones. Sobre todo, en el tramo final de los dos sets. En el octavo juego del primero, tuvo sus dos únicas bolas de break. No las convirtió y, en el siguiente asalto, cedió la manga con su saque. En el segundo set, casi siempre estuvo cerca al resto, pero nunca lo suficiente. El servicio, con unos primeros casi infalibles (63% y 89% de puntos ganados con ellos), siempre rescató a Sinner, que dominó de principio a fin pese a las circunstancias.

Son el tipo de victorias que definen a los campeones. Y que se necesitan en Shanghái, donde nadie revalida título desde Novak Djokovic en 2013 (además del serbio, en un torneo que se estrenó en 2009, solo lo ha logrado Andy Murray). Sinner, para acometer la misión, cuenta con que se le da especialmente bien jugar en suelo chino, donde acumula 23 victorias por dos derrotas, y con que no tiene a Carlos Alcaraz en el horizonte. Esta vez, la batalla será desde la distancia, pero será. Si repitiera título en el Masters 1.000, se quedaría a solo 390 puntos del número uno que posee el de El Palmar. Ese es su objetivo. Y ni su ‘peor’ día le puede apartar de él.

Zverev gana cojo… y con recado

No solo Sinner debutó con problemas este sábado. El primer partido del número tres del mundo, Alexander Zverev, tampoco fue nada cómodo pese al resultado. El alemán de 28 años, que en tercera ronda se medirá con Arthur Rinderknech (30 años y 54º), superó a otro francés, Valentin Royer (24 y 76º), por un doble 6-4 en 1h38. El último juego, debido a un mal apoyo tras saque, sin embargo, lo jugó completamente cojo. En sus declaraciones tras el partido, además, dejó un recado. “Odio cuando (la velocidad de la pista) es ​​la misma. Y sé que los directores de los torneos van en esa dirección porque, obviamente, quieren que Jannik (Sinner) y Carlos (Alcaraz) tengan un buen desempeño en cada torneo… Siempre tuvimos superficies diferentes, no se podía jugar el mismo tenis de la misma manera en hierba, dura y arcilla. Ahora, sí”, denunció.

Entre el resto de cabezas de serie, Andrey Rublev fue el gran derrotado del día. El ruso, de 27 años y 14º del mundo, no pudo con el japonés Yoshihito Nishioka (2-6, 6-1 y 6-4 en 1h47), que procedía de la previa. En el lado opuesto, Álex de Miñaur (26 y 7º) ganó con comodidad a Camilo Ugo Carabelli (6-4 y 6-2 en 1h28) para confirmar la mejor temporada de su carrera, alcanzando las 48 victorias en un mismo año por primera vez. Lorenzo Musetti (23 y 9º), que no falló ante Francisco Comesaña (6-4 y 6-0 en 1h27) y luego estuvo de espectador en el partido de Sinner, Felix Auger-Aliassime (doble 6-3 en 1h25 sobre Alejandro Tabilo) y Jiri Lehecka (6-4 y 7-5 en 1h25 sobre Quentin Halys) también avanzaron. El checo Jakub Mensik (20 y 16º), que no pudo con el holandés Jesper de Jong (4-6, 7-6(2) y 6-4 en 2h28), acompañó a Rublev. La sorpresa de la jornada supuso una gran alegría para el tenis chino, porque Jerry Shang, que compite con una invitación, pudo con el cabeza de serie número 9, el ruso Karen Khachanov (7-6 (3) y 6-3). Se enfrentará en la tercera ronda al portugués Nuno Borges.

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