Alcaraz crece para llegar a su primera final bajo techo

Carlos Alcaraz avanza de manera inexorable en su historia, que es también la del tenis. Sin pasar aún de los 21 años, quema etapas a toda velocidad y derriba barreras con la tenacidad de una estrella. Este sábado, el murciano superó en Róterdam a Hubert Hurkacz (6-4, 6-7 (5) y 6-3 en 2h20) y se clasificó por primera vez en su carrera para la final de un torneo que se disputa en pista cubierta. Entre todas las superficies, suma 22.

Este domingo (15:30, Movistar+), Alcaraz peleará por el que sería, en consecuencia, su primer título indoor. Lo hará contra Alex de Miñaur. El australiano de 25 años y número 8 del mundo acabó de forma contundente (6-1 y 6-2 en 67 minutos) con la trayectoria de ensueño del italiano Mattia Bellucci, que empezó el torneo en la previa y eliminó, consecutivamente, a Medvedev y a Tsitsipas. Carlos domina por 2-0 el cara a cara (Barcelona 2022 sobre hierba y Queen’s 2023 en tierra). Este será su primer duelo en cancha dura. “Solo pienso en recuperarme lo mejor que pueda, porque viene otra batalla contra un rival muy sólido”, avanzó el cabeza de serie número uno.

Alcaraz no había podido superar las semifinales tres veces bajo techo, en Viena 2021, Basilea 2022 y las ATP Finals 2023, y no alcanzaba el encuentro por un trofeo desde el pasado mes de octubre, cuando se impuso a Jannik Sinner en Pekín. Es el séptimo jugador en activo que alcanza ocho o más finales en ATP 500, categoría en la que atesora ya cinco títulos. Y también el tercer español que se mete en la última ronda del evento holandés, después de su entrenador (aunque esta semana le acompaña Samuel López), Juan Carlos Ferrero, que perdió contra Lleyton Hewitt en la de 2004, y Rafa Nadal, derrotado por Andy Murray en la de 2009.

Inicio complicado

Aunque ya le había vencido en tres ocasiones, el compromiso no era fácil para Alcaraz ante un Hurkacz que siempre ha sabido competir bien contra el de El Palmar. De hecho, la última vez que se enfrentaron, en las semifinales del Masters 1.000 de Cincinnati 2023, Carlos levantó un punto de partido antes de su triunfo. Y la salida del polaco de 27 años y 21º fue muy buena. En su primer resto encontró el break y luego llegó a tener una ventaja de 4-1 y un 0-40 para el 5-1. Con buenos servicios, revés paralelo, rapidez para defender y mano de doblista en la red, Hubert sorprendió. Hasta que Alcaraz llevó el choque a su terreno, el de la diversión y el espectáculo. Y en esa tesitura es el rey. Un parcial de 5-0 le permitió apuntarse un primer set que pintaba mal para él. “Luché por cada bola hasta el final. Sabía que llegarían mis opciones a ese nivel tan alto. Era cuestión de tiempo y el esfuerzo tuvo recompensa”, explicó.

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El segundo set fue más frío y ordenado, y ahí tenía las de ganar Hurkacz, que fue solventando sus turnos de saque y se encontró con la inesperada ayuda de Carlos en el desempate. Una doble falta y un par de errores le impidieron cerrar el triunfo cuando gozaba de un 5-4 y dos saques. Lo normal es que el ganador de cuatro Grand Slams hubiera iniciado la tercera manga un poco aturdido por la decepción. Sin embargo, la empezó a toda máquina, con un 3-0 que le puso camino de la victoria. Muy inteligente, felino, valiente en la red y contundente en el golpeo, Alcaraz se fue merendando a Hurkacz, descansó en algún juego al resto y no dejó que su oponente se le acercara ni tuviera más opciones de break. Con una derecha ligeramente cruzada, clausuró el encuentro que le pone al borde de un nuevo hito en una etapa aún temprana de su historial.

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