Alcaraz combate el fuego con fuego ante Perricard en Pekín
El español domina con su saque al cañonero francés y resta mucho y bien para poner la guinda con un break en cada set. Se enfrentará en segunda ronda al neerlandés Griekspoor.
Gran inicio de Carlos Alcaraz en su segunda participación en el China Open. El español, que fue semifinalista en 2023, combatió el fuego con fuego para vencer por un doble 6-4 en 81 minutos al cañonero Giovanni Mpetshi Perricard (21 años y 51º). Lo hizo con una buena actuación al servicio contra el mejor sacador del circuito por media de aces (más de 19 por partido) y calidad (9,5). Un 61% de primeros, 74% de puntos ganados con ellos y, lo que es más importante, un 82% obtenidos con segundos. Además, resto mucho y bien para encontrar dos quiebres, al inicio de cada una de las mangas, que le sirvieron a Alcaraz para solventar un encuentro poco vistoso y sin ritmo en el que hizo lo que tenía que hacer.
“El plan era poner todos los restos que pudiera y no era fácil, porque él saca a 240, 230 casi cada servicio, y los segundos a 210, 215... Es un jugador muy poderoso, gran sacador, con buenos tiros desde la línea de fondo. Tenía que estar muy concentrado, no cometer muchos errores y ser agresivo cuando pudiera para tratar de poner presión en sus juegos de servicio”, analizó Alcaraz. Con la confianza que le dará un estreno tan solvente, se enfrentará el domingo en la segunda ronda al neerlandés Tallon Griekspoor (28 años y 32º del mundo). Será su cuarto enfrentamiento, segundo en 2024. Los tres primeros se los llevó el murciano.
Paciencia
No era sencillo el compromiso para Alcaraz, como él recalcó, ante un rival de 2,03 metros de estatura, capaz de servir a 240 km/h y con medias de 219 con primeros y 208 con segundos. Impresionante. Además, el tenista de Lyon es rápido para lo corpulento que es y tiene buena mano cerca de la red. En su debe, la falta de consistencia para encarar situaciones de presión y un revés a una mano que en su juego es un golpe de transición salvo en contadas excepciones. Por eso se lo buscó con ahínco Carlos, con buenos resultados.
La paciencia para variar los saques, tanto en velocidad como en colocación le costaron dos avisos a Alcaraz. Pero así debía actuar para superar a un oponente tan peligroso, como demostró en Wimbledon cuando llegó a octavos, y joven. De hecho, esta fue la tercera vez que el de El Palmar se enfrentaba a un alguien menor que él, aunque sea por solo dos meses. Los anteriores Jerry Shang en el Open de Australia y Mark Lajal en Wimbledon esta temporada.
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