Davidovich alcanza los cuartos y su mejor ranking
El español gana al chileno Garín, se mete por tercera vez en la antepenúltima ronda de un Masters 1.000 y se pone 25º del mundo. Medvedev, rival este miércoles.
Alejandro Davidovich dio este martes otro paso importante en su carrera. El malagueño de 23 años ganó en Indian Wells a Christian Garín por 6-3 y 6-4 en 1h24, se clasificó por tercera vez para cuartos de un Masters 1.000 y se aseguró aparecer el próximo lunes en el puesto del ranking más alto de su carrera: 25 o 26 dependiendo lo que haga esta semana el británico Jack Draper, el único que le puede adelantar, en el desierto de California.
Pletórico físicamente, Davidovich pudo desplegar su tenis eléctrico ante un rival, el chileno de 26 años, que se hundió en la clasificación (es 97º) e intenta asomar la cabeza tras una época de malos resultados. El jueves, Alex se medirá este miércoles (no antes de las 23:00, Movistar Deportes) con el ganador del duelo estelar de la jornada, el ruso Daniil Medvedev, que pese a torcerse el tobillo derecho en una caída (”Sorprendentemente me costaba menos correr que andar”, reveló) y a sus quejas por la lentitud de la pista, mantuvo su racha (17 victorias seguidas) para ganar al alemán Alexander Zverev (6-7 (5), 7-6 (5) y 7-5. Hace unas semanas se enfrentaron en Róterdam y Foki le puso muy difícil el triunfo. “Ahora que me he enfriado, (la inflamación) es grande. No puedo caminar correctamente. Pero todo va a estar bien, voy a vendarlo mañana, tomar un analgésico e ir a jugar”, advirtió el moscovita.
Los mayores éxitos de Davidovich en la segunda categoría de los torneos ATP habían llegado hasta ahora en Montecarlo, donde fue cuartofinalista en 2021 y alcanzó la final en 2022. “Estoy muy feliz. Ahora es el momento de dar un paso adelante y seguir empujando”, expresó.
Concentración y constancia
Davidovich no se apartó ni un momento de su objetivo en el partido, ni siquiera cuando las cosas le fueron peor. Lucha con su temperamento y se le ve meditar en los descansos, con los ojos cerrados. En el primer set rompió para ponerse con 3-1 y saque y volvió a hacerlo después para tomar aún más distancia (5-1). Garín acortó hasta el 5-3, pero en su primer oportunidad de cerrar la manga, el del Rincón de la Victoria no perdonó. El segundo parcial se le puso cuesta arriba con un 4-2 para el santiagués. Sin embargo, no se dejó llevar por la desesperación y remontó con un furioso 4-0 que le dio el triunfo. Y demostró que también tiene mucha mano. “Hago juegos y minijuegos desde pequeño para tener ese toque. Cuando lo hago bien disfruto, cuando me sale muy mal, digo, ‘OK, todo el trabajo para nada”, bromeó.