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MUTUA MADRID OPEN | SCHWARTZMAN

“Si juega como entrena, veo a Nadal ganando Roland Garros”

Diego Schwartzman, que se entrenó hace unos días con el balear (“Me cagó a palos”, confiesa), se ve con “regularidad” para seguir compitiendo “a un alto nivel”.

Madrid
“Si juega como entrena, veo a Nadal ganando Roland Garros”
GABRIEL BOUYSAFP

Después de ganar en primera ronda del Mutua Madrid Open a Benoit Paire y antes de enfrentarse a Grigor Dimitrov en la segunda, Diego Schwartzman (Buenos Aires, 29 años) atendió a AS para hablar de su temporada, del tenis argentino y de las dos grandes estrella del español.

¿Cómo se encuentra en Madrid?

Bien, contento de poder participar una vez más en un torneo como este, de llegar en buena forma, que es una de las cosas más importantes a la hora de venir a un evento grande. El debut (contra el imprevisible Benoit Paire) era difícil por la forma de jugar que tiene él, porque era el primero mío y él ya había jugado los dos de la previa, lo que te da ventaja para conocer el lugar y las condiciones en la competencia. Pero hice muy buen partido en los tres sets, el que me ganó fue por un detalle, porque tuve más oportunidades y él terminó jugando en un alto nivel. Fue bueno y contra Dimitrov el desafío será aún más grande.

¿Usted es los jugadores que acusa negativamente el factor de la altura de Madrid?

Sí, porque creo que Madrid es un poco más amigable para los que no les gusta tanto el polvo de ladrillo, más que para los que jugamos acá. La altura hace que las condiciones sean más rápidas y que necesites menos tiros para ganar puntos. Eso hace que a ese tipo de rivales se les acomoden mejor las circunstancias.

¿Qué debe hacer un especialista en tierra para sobrevivir en el Mutua?

Es un poco contradictorio, pero cuanta más altura hay, más fuerte y acelerada la pelota de tu mano tiene que salir. Porque eso hace que baje. Cuando uno duda un poco y baja la intensidad por querer cuidar un poco más la bola para que entre, pensando que va a flotar, a volar un poquito más por la altura y salir, es donde más errores uno comete. Cuanto más buscás y más querés acelerar y más intensidad le imponés a cada golpe, mejor te obedece. Es uno de los detalles, pero lo que más vale acá en Madrid y termina siendo muy importante es el saque. Con un buen primero, en algunos partidos puedes hacer mucho daño.

Lleva un buen año y ahora está en la parte crucial para usted. ¿Cómo se está viendo y en qué ha mejorado su juego?

Creo que volví a tener regularidad en casi todos los torneos, salvo Miami, la única primera ronda que me tocó perder (contra Kokkinakis), aunque tuve match-point, lo estaba jugando muy bien y se me escapó. Es el único momento que tengo para reprocharme realmente en lo que va del año, porque en el resto de los partidos pude competir en un alto nivel y llegar a instancias relevantes. Ojalá que pueda seguir de esta manera. Nunca sabés cuándo te va a ir mejor, cuando te va a ir un poquito mejor, así que hay que estar preparado para cualquiera de las dos cosas y seguir estando listo para competir.

¿Qué paso el año pasado para que no fuera tan bueno como el anterior?

No coincido. Había terminado 2020 como ocho del mundo y el año pasado terminé 14. Es que el anterior fue el mejor de mi carrera. Para mí, 2021 fue un gran año, salvo en la gira de tierra, que de las peores de mi carrera. Solo pude ganar partidos en Barcelona y Roland Garros y en el resto me tocó perder partidos en primera ronda. Esa parte sí fue complicada, porque estaba jugando mal. Fue un mes y medio que me costó. Estaba un poco cansando, no estaba compitiendo bien, no tenía paciencia y al final un tiempo malo en el año cuando estás dentro de los 15 mejores del mundo, te afecta en el ranking y te puede echar un poco para atrás. En la segunda parte gané muchísimos partidos y volví a sentirme bien, ganando muchos partidos, llegando a finales y compitiendo muy bien. Eso fue muy importante para este año empezarlo de vuelta con confianza. Ahora, como dije, estoy siendo más regular. En aquel momento perdí la regularidad.

El circuito es duro, con altos y bajos, y este año está habiendo muchas retiradas, como la más reciente de Anderson. ¿Cómo se alimenta la motivación para entrenar y jugar cada día?

Es raro hoy ver que alguien a los 35 se retire. Antes, un jugador era muy mayor a esa edad y ahora parece que es bastante joven y que puede seguir a un muy alto nivel. Un jugador como Anderson, que hizo cosas cruciales en su carrera, anunció su retiro, y muchos están cerca también, con muchos años en el circuito. Siendo sudamericano es muy difícil aguantar hasta una edad avanzada, porque nunca estamos en casa, la cantidad de viajes al año es infinita. Si la tenemos que comparar con la carrera de un europeo y un americano, se hace mucho más cansadora, es una realidad, y quizá eso te saca algunos años de carrera. Yo cumplo ya 30 y va pasando el tiempo. Me sigo sintiendo chico, pero veremos hasta donde tira la máquina.

En Argentina usted lleva unas cuantas temporadas siendo el referente, porque Juan Martín del Potro no podía jugar. Probablemente, no regrese y usted será el buque insignia del tenis del país. ¿Cómo lo ve?

Bueno, seguramente cambie la forma de jugar, porque Juan Martín y yo no teníamos mucho parecido en la altura, la agresividad y el estilo (se ríe). Él fue un gran referente, más allá de que esté todavía decidiendo si este es el final de su carrera. Sigue manteniendo esa capacidad de influir aún estando fuera de la cancha. Hoy me toca a mí la posición de ser el mejor de Argentina. A veces lo tomo para intentar ser un ejemplo en alguna que otra cosa, pero al final cada uno tiene su carrera, y hay tenistas que están un poco más atrás, pero jugando en un alto nivel y son diferentes en muchas cosas. Cada uno tiene lo suyo y lo mejor es no quedarse solamente en lo que hace uno, porque cada carrera es muy distinta, cada manera de jugar es muy distinta y sacar un poquito de cada uno, al final es lo mejor.

Ahora hay un repunte de jóvenes como Báez, los Cerúndolo, Etcheverry... ¿Qué opina de ellos?

No sé hace cuanto, pero Argentina vuelve a tener cuatro jugadores en el top-50 y más dentro del top-100, otros cerca, varios de ellos jóvenes como los que has nombrado. Es muy bueno para la región. Hay cosas que han ayudado mucho, como los Challengers que organizó De la Peña, exjugador, algo que hace que muchos más tenistas puedan competir cerca de casa y tengan la oportunidad de meterse dentro de los mejores del mundo y empezar a jugar ATP más seguido. Para Báez es su primer año y ya tiene un título y otra final, ganando partidos de Grand Slam. Viene jugando espectacular, así que seguramente le esperen muchos buenos años.

A usted le tocó 'sufrir' a Carlos Alcaraz (en la final de Río), ¿cómo lo ve?

Verlo lo veo como lo ven todos. Más allá de ser colega y fijarme en los detalles técnico, es impresionante la capacidad que tuvo del año pasado a este para crecer, como creció en su juego, en su capacidad mental de afrontar los partidos. Creo que lo que más me gusta, viéndolo también ganar en Miami, es la capacidad de adaptarse al rival. A veces uno tiene una forma de jugar y siempre quiere que prevalezca, pero él fue cambiando mucho su forma de jugar, contra Hurkacz, contra Ruud, en Barcelona, con De Miñaur, con Carreño. Su estilo es muy agresivo, pero no deja adaptarse si tiene que correr, pasar pelotas... Eso para un chico que recién está por cumplir 19 es un poco más difícil de ver. Lo bueno es que se le puede conocer más por el idioma, por las costumbres... Nos llevamos bien, la gente que le rodea es muy buen y eso hace que se lo pueda tratar más. Algunas de las mejores cosas que tiene también están fuera de la cancha. Que sea tan joven y que le esté yendo tan bien puede ser un muy buen ejemplo para el futuro del tenis y muy sano.

Para muchos argentinos, Nadal es una referencia. Usted se entrenó en Madrid hace unos días, ¿le ve resurgiendo por enésima vez y ganando Roland Garros?

Me cagó a palos (risas) en ese entrenamiento. La verdad es que sí lo veo. Si juega como entrena seguro que sí. Este año perdió un partido, con Fritz en la final de Indian Wells. En su sangre ya se siente más ganador que el resto, por más de que tenga la humildad fuera de la cancha de verse a la par, yo creo que se ve muy ganador. Está acostumbrado a tener parates por lesiones y no jugar algunos meses. Entonces opino que le da la sabiduría de saber cómo volver y como prepararse. Él sabe cómo hacerlo y este año viene teniendo un nivel aún mejor que en los últimos años de su carrera y yo pienso que él lo siente de esa manera, así que es claramente el candidato en esta gira de tierra.