Naomi Osaka remonta y jugará una final 406 días después
La japonesa venció por 4-6, 6-3 y 6-4 a Bencic y se enfrentará el sábado a Swiatek, que pudo con Pegula (6-2 y 7-5). Puede volver al top-30 si gana el título.
Después de padecer una larga travesía por el desierto con problemas psicológicos y también de juego y resultados, Naomi Osaka vuelve por sus fueron en el Miami Open. La japonesa remontó para vencer este jueves por 4-6, 6-3 y 6-4 a Belinda Bencic, una rival que le tenía tomada la medida hasta el punto de haberla ganado en tres de sus cuatro enfrentamientos y clasificarse para la final que disputará el sábado ante la polaca Iga Swiatek, que pudo con la estadounidense Jessica Pegula (6-2 y 7-5) e intentará completar el Sunshine Double, ganar Indian Wells y Miami en un mismo año.
Osaka jugará el partido por un título 406 días después del último en el que compitió, la del Open de Australia de 2021, cuando se proclamó campeona. Es la undécima de la carrera de la ganadora de cuatro Grand Slams. Llega tras una semana y media sobresaliente. Antes de su encuentro contra la suiza, sólo había perdido una vez el saque. Bencic se lo rompió cuatro veces, pero Osaka tuvo la fortaleza mental que le había faltado en anteriores ocasiones para cerrar un triunfo que significa "mucho" para ella, como reconoció entre lágrimas de alegría y aplausos del público al final del partido. "Me las he arreglado de alguna manera para darle la vuelta", explicó.
Su mala racha había llevado a la nipona a caer al fondo del top-100. El 31 de enero, después de fracasar en Melbourne, era la 85ª del mundo. Ahora ya es virtualmente la 36ª y puede subir hasta el puesto 30 si levanta el trofeo. Su timidez para enfrentarse a las ruedas de prensa, y la sensibilidad para afrontar muy dolorosamente los insultos de los aficionados tanto en vivo como en las redes sociales fueron algunos de los problemas que lastraron a Naomi, que parece volver a centrarse en el tenis. Y de eso, aún tiene mucho.
Bencic se desinfla
Lo demostró ante un Bencic que peleó, pero que se desinfló al no poder encontrar las soluciones que la habían permitido ganar en anteriores duelos. Llevaba 11 victorias contra oponentes japonesas, incluidas las tres ante Osaka. Esta vez no pudo ser porque se atascó después de un buen primer set. Peleó hasta el final, incluso con 5-2 en contra al resto cuando logró acortar hasta el 5-4. De ahí no pasó su reacción. Era su sexta semifinal de un WTA 1.000 y se le siguen resistiendo las finales en la categoría. Osaka será quien la juegue la cuarta.