OPEN DE AUSTRALIA | CARLOS MOYÁ
"Rafa nos dijo: 'Vamos a tope y si me rompo, me rompo"
Carlos Moyá, entrenador de Nadal, ha vivido de cerca las dudas sobre la lesión de Nadal. Pero decidieron jugar en Melbourne, donde está en semifinales.
En la entrada del Centro Nacional de Tenis, anexo a Melbourne Park, Carlos Moyà (Palma de Mallorca, 45 años) se sienta con AS para hablar sobre Rafa Nadal y el proceso que ha hecho realidad su enésimo regreso. Su entrenador no oculta que hubo malos momentos, pero ahora le ve listo para hacer una gran temporada. Este viernes (4:30, Eurosport) se enfrenta a Matteo Berrettini en las semifinales del Open de Australia.
¿Hasta qué punto fue crítica la situación de Nadal cuando tuvo que parar en agosto?
Él arrastraba ese problema ya desde después del Open de Australia del año pasado. En realidad, siempre ha tenido problemas con el pie, pero hasta ahora solo le afectaban a los entrenamientos y en momentos puntuales. Pero llegó un punto en el que veíamos que los tenía con más frecuencia y que ya no solo eran entrenando, sino en partidos. En París le pasó y luego no fue a Wimbledon. Reapareció en Washington y era una incógnita cómo estaría. Fue lo que mismo que ahora, fuimos a ver qué pasaba, pero ahí salió mal y aquí ha salido bien.
¿Tan extremo?
Las circunstancias han sido parecidas. Siempre piensas que en competición va a estar mejor y allí no pudo ser porque dolor en el pie era insoportable. Fue a Toronto y ya ni compitió. En España es cuando se decidió parar. El tema de esta lesión es que no hay un tratamiento definitivo. Si se pudiera operar, estar seis meses fuera y quedar bien… pero no es así. Luego fuimos sobre la marcha, con varios tratamientos. A veces mejoraba y otros días iba para atrás, volvía a empeorar. Hasta que a finales de noviembre, dijimos, mira, a vamos a tope y si ya no pasas la prueba de Abu Dabi, pues no vamos a Australia.
¿Llegaron a pensar que no podría volver a jugar?
Tuvimos varias conversaciones durante la pretemporada, porque veíamos que no avanzaba. Hasta que él le dijo: 'Vamos a tope y si me rompo, me rompo'. No podíamos plantearnos ir a un Grand Slam con partidos a cinco sets sin hacer una prueba antes. La de Abu Dabi salió muy bien, sobre todo por el pie, aunque perdiera los partidos. Después de ahí vino lo de la COVID, y volvimos a plantearnos si podíamos ir con las condiciones mínimas requeridas para ser competitivo.
“Hubo momentos en los que Rafa no se sintió jugador”
¿Al equipo le ha sorprendido la respuesta que de Rafa en Melbourne?
Es el poder de la competición, la cabeza se transforma cuando te notas jugador de nuevo. Él en estos últimos meses hubo momentos que no se sentía jugador. La cabeza trabaja conforme a lo que tú te sientes. Lo de Abu Dabi fue un paso adelante y confiábamos en que aquí la cabeza también le ayudaría al verse competitivo de nuevo, entrenándose con jugadores de nivel, estando el circuito, viajando… Eso sucede, yo lo sé por propia experiencia, lo viví. Todo eso hace que te transformes y luego no tienes que estar limitado físicamente. Desde el principio vimos que se encontraba bien en la pista a pesar de haber tenido muy pocos entrenamientos por el tema de la COVID. Pero el primer torneo que jugó, esos partidos, le vinieron bien para ir entrando en competición.
¿De qué manera se han adaptado los entrenamientos y el juego para evitar que el pie de Nadal sufra?
Llevamos años haciendo esto y cada vez se va a tener que hacer más, porque las pistas son más rápidas, los jugadores le pegan a la bola más fuerte y él va cumpliendo años y va teniendo más desgaste. Para ser competitivo hay que hacer cosas nuevas. El saque esta semana es una de las cosas que está yendo bien y en lo que insistimos. Para el juego que queremos hay que estar fino y jugando bien, con más riesgos para dominar más la bola y ser más agresivo. Todo esto requiere que estés más convencido y capacitado para hacerlo, aunque habrá días que no te sientas tan bien y no puedes ejecutar ese plan. El día de Khachanov fue muy bueno, estuvo a un gran nivel. Contra Giron también, pero quizás el rival no era de tanta exigencia, aunque jugaba. Con Shapovalov era difícil tener cierto control porque es súper agresivo y zurdo, aunque un tanto irregular.
¿Cómo se puede jugar con un hueso partido, como dice Nadal?
Lleva muchos años así, el hueso va degenerando poco a poco. Si tú te fijas en la forma del pie, lo ves. Tiene una cosa muy rara ahí. No es que sea un hueso roto como tal, no soy médico, pero hemos visto los informes y es otro tipo de rotura. No obstante, lo que él dice es así, aunque suene raro, y es algo que va empeorando.
¿Y ahora qué opciones le ven de hacer algo grande en Australia?
Una vez estás en semifinales, el porcentaje de efectividad suyo es alto. Quedan otros tres jugadores y dos partidos, los más duros del campeonato. Si la pregunta me la hubieran hecho la primera semana, el primer día, habría dicho, 'vamos a hablar más adelante'. Pero ahora estamos en una posición buena y a partir de aquí cualquier cosa puede pasar. Rafa es Rafa y con él siempre tienes la esperanza de que pueden pasar cosas positivas.
¿Qué les preocupa de Matteo Berrettini?
Tiene muy buen saque, muy buena derecha y para lo alto que es se mueve bastante bien. Entiende bien el tenis, tiene buena mano, cuando tiene que volear, volea. Te varía el juego. Es muy agresivo pero con cabeza. Rafa jugó contra él en 2019, cuando era la sorpresa, menos jugador que ahora. Ha ido mejorando y está teniendo más regularidad. Ahora ya no es nuevo encontrarlo en estas rondas que le corresponden por jerarquía y por tenis. Pero Rafa también tiene sus armas y vamos a intentar utilizarlas. Tú puedes tener un plan, una estrategia, pero si no estás fino, pues hay que adaptarse y cambiar un poco. Creo que Rafa eso lo hace a la perfección, es el jugador que mejor lee por dónde va el partido, cuándo tiene que apretar, cuándo se puede dejar llevar y eso es una ventaja que veo que otros muchos jugadores no tienen.
"Dependerá de si Rafa sigue siendo competitivo, pero no jugará 20 torneos"
¿A Rafa le trastocó algo el conflicto de Djokovic?
Ya estábamos aquí cuando pasó todo esto y Rafa siguió haciendo su camino. Obviamente, estábamos informados, porque era imposible no estar al día del follón que se montó, de todo lo que iba pasando. Pero nos intentamos abstraer de eso y seguir con nuestro plan.
¿Y usted qué opina de ese caso?
Hubo muchos fallos por muchas partes. Hay unas reglas muy claras. No entiendo cómo le dejaron venir para que pasara lo que pasó. No sé si fue por parte del Gobierno, la organización, no sé quién fue, hubo falta de coordinación. La regla es clara, si no estás vacunado, no entras. De hecho, del top-100 hay 98 vacunados y dos que no. Uno no vino (Tennys Sandgren) y el otro es Djokovic. Hablamos de un país (Australia), que es de los que mejore ha llevado el tema del COVID. Han tenido algo más de 2.000 muertes en toda la pandemia, el equivalente a tres días en España en el peor momento. Lecciones a este país de COVID no se le pueden dar, sobre todo después del confinamiento de más de 270 días que sufrió Melbourne. Tienen que hablar los expertos, los epidemiólogos, los médicos. Al final tenemos una cierta información, pero hay que intentar respetar las leyes de cada país. La ley de este, es que si no estás vacunado, no puedes entrar. El lío lo montaron todas las partes.
¿Hasta qué punto ha sido perjudicial en los torneos el protocolo COVID?
A ver, no es fácil, pero estamos ante una pandemia a nivel mundial y han muerto millones de personas, otros millones han perdido su trabajo, sus negocios. Nosotros tenemos la suerte de poder seguir haciendo nuestro trabajo con restricciones, ahora menores. No son las condiciones ideales, pero tienes que adaptarte y ser agradecido a que de cierta manera puedes ejercer tu trabajo con cierta normalidad. No es fácil, pero entendemos que hay mucha más gente que lo ha vivido de mucha peor manera.
¿Está perfilado el resto de la temporada?
Dependerá de los resultados y de si Rafa sigue siendo competitivo y ganando partidos. Así tendrá la opción de elegir bien. Si sale del top-10, pues igual va a jugar a más sitios. Tenemos todo más o menos marcado y reducir no podemos reducir más, porque es imposible, pero está claro que no va a jugar 20 torneos al año.
¿Usted que fue número uno del mundo, qué opina de las quejas de Shapovalov sobre un supuesto trato de favor a los mejores jugadores?
Fue un poco la frustración de un partido que tenía bastante de cara y se le escapó. Son declaraciones en caliente, justo después de perder, de un chico joven al que le falta experiencia todavía. Seguro que en él en el calor de la batalla dijo cosas que no sentía. Si los jueces fueran corruptos, como él dijo, él habría sido expulsado desde ese momento. Si hubiera ese trato de favor, el no habría seguido jugando. Rafa fue bastante benevolente en este aspecto con en el chaval diciendo que se había equivocado y que no se lo tenía en cuenta. También decir que Rafa fingió el tema del médico, cuando él nos dijo que estaba muerto y perdió cuatro kilos… Nosotros sabíamos que a Rafa le pasaba algo, que no era en la pista. Dicho esto, entiendo que es un partido duro de aceptar y no le damos diera importancia porque es un chico que nos cae bien.
¿Qué tal fue el día de recuperación?
Le pasó algo puntual, que le ocurre una vez cada cierto tiempo. Tiene un día malo de calor y humedad y ya está. Si hay que pasarlo, cuanto antes, mejor, porque si lo superas sales fortalecido. Y en ese aspecto, mentalmente, él salió muy fortalecido. Las condiciones esta vez serán distintas (anuncian lluvia) y ha tenido dos días para recuperarse. Eso no va a ser un problema.