Garbiñe Muguruza: "Mi tenis está mejor que nunca"
Tras su flamante 2021, la hispano-venezolana afronta este martes su primer partido del Open de Australia ante la francesa Burel. Antes, atiende a AS.
Garbiñe Muguruza (Caracas, 28 años), afronta el Open de Australia como número tres del mundo después de ganar a finales del año pasado las WTA Finals. No le importa generar expectativas y se ve en el mejor momento de su carrera. En 2020 jugó la final y la perdió ante Kenin. El martes (01:00, Eurosport) debuta contra la francesa Burel (20 años y 78º).
¿Qué motivaciones tuvo para para retrasar un poquito el final de la pretemporada en España?
Fui de las jugadoras que más tarde acabaron, bueno, Kontaveit y yo (las finalistas de las WTA Finals). Eso contó, lógicamente, pero también el sentir que no había prisa por comenzar el año, que es mejor empezar sintiéndote quizá un poco más preparada, con un poco más de tiempo. Al final, quizá una semana no parezca mucho tiempo, pero las pocas que tuvimos desde el último torneo hasta ahora, influyen bastante. Sabía que podía jugar en Sídney y prepararme para el Open de Australia, no quería verme apresurada. Me estoy entrenando bastante desde hace varios días, a ver si eso me ayuda a empezar con buen pie.
Estuvo en Marbella casi toda la preparación, ¿en qué cosas hizo hincapié allí?
Hicimos un buen trabajo físico, ya sabemos que la pretemporada es cuando se puede trabajar más físicamente, porque luego cuando estás en competición pues es más jugar y jugar al tenis. Me concentré mucho en el saque, por ejemplo, que es un aspecto importantísimo porque cada día las jugadoras sacan más fuerte y mejor. Creo que el tenis se está convirtiendo en un deporte de tres o cuatro golpes y hay que tenerlos bien definidos. También trabajé un poco en mi consistencia, en intentar mantener lo que he estado haciendo a lo largo del año pasado, que fue bastante bien.
¿Hasta qué punto le género ilusión acabar la temporada con ese título tan importante en Guadalajara?
Fue la mejor manera de acabar el año, ganando un torneo en el que tienes a las mejores jugadoras del curso, en el que cada partido es como una final de un Grand Slam o de un torneo importante. No hay una ronda en la que te toque una jugadora que quizá esté más atrás en el ranking. De todas las mejores fui yo la mejor. Fue una confirmación de que mi tenis está mejor que nunca, solo hay que sacarlo y juntar todas esas piezas, la bola, la confianza, el clima, yo… En fin, ya sabemos que es muy complicado que esté todo, pero si se da, realmente puedo ser de las mejores o la mejor.
Da la sensación de que se ve en el momento de madurez más alto de su carrera, por tenis, por edad, por experiencia… ¿Es así?
Sí, yo creo que es así, la verdad. Luego jugaré bien o mal, pero yo en sí me siento mucho más ‘tranqui’, más estable. Antes todo me pillaba de una manera más emocional y ahora me veo con las cosas más aprendidas, con los momentos duros también más aprendidos… y los buenos más calmados. Eso se me ayuda a gestionar todas estas emociones.
¿Qué pálpito tiene sobre sus opciones en el Open de Australia?
No me gusta adelantar expectativas. Como acabé bien el año pasado, ganando el último torneo, ahora todo el mundo igual piensa que Garbiñe tiene que seguir en esta línea y tiene que al menos llevarse el trofeo. Yo intento controlar un poco esas expectativas que tengo, porque son altas, porque quiero seguir en esta línea. Y hay este runrún que una tiene que calmar. De momento, quiero entrar con buenas sensaciones. Ya sabemos lo que sufres, la extensión de manejar dos semanas de torneo. Sé lo que es y sé lo que es llegar a la final, así que tendré que aplicar todos esos conocimientos a ver si lo consigo.
¿Le incomoda volver a ser considerada una de las grandes favoritas después de haber afrontado los anteriores Slam con un perfil más bajo?
Creo que los que sabéis de tenis entendéis que tampoco se puede asegurar nada y yo me preparo igual, pienso lo mismo. Creo que estoy jugando bien y que puedo mantenerlo para avanzar en el torneo. No me molesta para nada, yo creo que es algo genial estar entre las posibles candidatas, siempre ha sido lo que he querido. ¿Que es difícil de llevar? Claro, pero bueno, esa es la presión que tienen los mejores. Aunque me sienta más nerviosa o tenga más presión porque no quiero decepcionar a la gente… 'Garbiñe, son problemas de privilegio, te calmas y sales a dar tu mejor esfuerzo y con eso tiene que ser suficiente'.