Djokovic se ensaña con Davidovich para llegar a cuartos
El número uno del mundo machacó al español con un demoledor parcial de 9-0 y se enfrentará por un puesto en semifinales a Tsitsipas.
Salvo en los compases iniciales, con un sorprendente quiebre de salida de Alejandro Davidovich, prácticamente no hubo partido entre el español y Novak Djokovic, porque el serbio no dio más opciones en el resto del partido, sobre todo desde el 2-2. A partir de ahí, solventó el compromiso con un demoledor parcial de 9-0 ante un rival que le conocía porque se habían entrenado juntos varias veces en Marbella. El resultado lo dice todo: 6-2 y 6-1 en 70 minutos. Así, con mucha facilidad, entró Djokovic en cuartos de Roma por 15ª vez en otras tantas participaciones. Su rival será duro, Stefanos Tsitsipas, campeón en Montecarlo y subcampeón en Barcelona, que superó al italiano Matteo Berrettini, ganador en Belgrado y finalista en Madrid. El griego ganó por 7-6 (3) y 6-2 y ha alcanzado los cuartos e ocho de los nueve Masters 1.000.
Ya con público en la Centrale, el partido empezó bonito para Davidovich, que jugó con valentía y obtuvo el premio inmediato del break. Djokovic necesitaba hacer algunos ajustes sobre la marcha para poder dirigir el partido a su antojo. Y armado con su preciso revés lo consiguió. El malagueño comenzó a fallar (30 errores no forzados) por la necesidad de arriesgar, de jugar al límite, y lo aprovechó para ganar terreno el balcánico, que de camino aplaudió un gran globo de su oponente.
Era cuestión de tiempo que el maestro doblegara al aprendiz, con quien ha tenido algunas charlas sobre tenis según reveló Alex. De hecho, tras el intento inicial de romperle el saque en el segundo set, Djokovic le comió la moral al muchacho, en los peores momentos anímicos para él. Al menos, recuperó las ganas y la competitividad para evitar el rosco. Al final hubo un cariñoso abrazo en la red. Davidovich, que tuvo que jugar la previa, puede salir de Roma con el mejor puesto de su carrera en el ranking, el 45.