"Quiero volver a jugar, pero también estoy preocupada"

La vuelta del tenis de manera oficial está cada vez más cerca, y en el caso del circuito WTA será antes que en el ATP. Las féminas tendrán el 3 de agosto en Palermo el primer torneo después de que se parara toda la actividad en marzo por la pandemia. La mayoría de jugadoras se muestran optimistas con el regreso, aunque algunas de ellas muestran reticencias, como es el caso de Naomi Osaka. La japonesa, que llegó a ser número uno del mundo, ocupa el décimo puesto actualmente del ranking WTA con 22 años. Habló sobre el retorno: "Quiero volver a jugar. Me estoy preparando de la mejor manera, pero también estoy muy preocupada", dijo a Tennis Now.

"Si las reglas siguen cambiando, si hay una nueva ola de contagios, no sabemos qué sucederá. También me preocupa viajar, ya que tenemos que hacerlo con mucha frecuencia. Tendré que encontrar el equilibrio para mejorar aún más mi tenis, pienso sobre todo en las cosas en las que trabajé durante la cuarentena. Todos los tenistas y todos los tenistas son competitivos y cuando no hay competencia es aburrido", añadió la ganadora del US Open en 2018 y del Open de Australia en 2019.

Un pensamiento similar tiene Angelique Kerber, la alemana a la que solo se le resiste Roland Garros tras tener en su palmarés WImbledon, US Open y Open de Australia, estos dos últimos en un 2016 mágico. “La seguridad de todos los participantes es la prioridad para mí. Todos queremos volver a la normalidad y volver a jugar, pero debe haber las condiciones adecuadas ", dijo la alemana de 32 años. "¿El US Open? La atmósfera en Flushing Meadows, sin duda, no será la misma que en años anteriores, pero pretendo que las condiciones sean las mismas para todos los jugadores", concluyó.