A Djokovic no se le atraganta Edmund, pero le espera Tsitsipas
Djokovic, que arrastra una molestia en la garganta, pudo con Edmund, aunque sigue sin ofrecer buenas sensaciones y este viernes se las verá con un rival más fuerte: Tsitsipas.
Novak Djokovic avanza en París entre dudas debido a los problemas que arrastra por una enfermedad que le provoca dolor de garganta y síntomas de debilidad. Lo advirtió tras ganar el miércoles con apuros en un partido extraño al francés Moutet en su debut en la segunda ronda del Masters 1.000 francés. Este miércoles, el serbio logró sobrevivir con más holgura tras superar un comienzo algo menos complicado en el primer set y arrasar después a Kyle Edmund en el segundo, que cerró con demoledor parcial de 6-0: 7-6 (7) y 6-1 en 1h:22. Fue su victoria 50 de esta temporada, la 12ª que llega a esa cifra en su carrera.
Lo malo para Djokovic es que este viernes le llegan curvas. Se enfrentará en cuartos, en horario aún por confirmar, a Stefanos Tsitsipas (también suma ya 50 triunfos en 2019), su verdugo en Shanghái hace unas semanas, un rival que le ha tomado la medida y contra quien tiene balance corto, pero negativo (1-2). El griego, que ha recuperado la forma tras un mal valle de juego y resultados, ganó con mucha autoridad (6-3 y 6-4) a De Miñaur, el joven australiano que eliminó y dejó sin ATP Finals a Roberto Bautista.
Lo mejor para Nole es que ante un romo Edmund, que sólo mostró su mejor tenis con cuentagotas, no tuvo que jugar más de dos horas como le sucedió ante Moutet. Le costó entrar en el partido, aunque defendió sus saques sin mayores problemas y resolvió la papeleta con ciertos apuros en el desempate tras desperdiciar antes dos puntos de set. La segunda manga ya fue otra historia. Liberado, Djokovic pasó por encima del británico, al que ya se le hizo misión imposible dar la sorpresa ante el número uno del mundo, que sigue en la pelea con Rafa Nadal por serlo a final de año. De momento, ha descartado una de las opciones que tenía el balear de atarlo en París: llegar a semifinales y que el balcánico no alcanzará los cuartos. Ahora, Nadal tiene otras dos opciones siempre que gane a Wawrinka, claro: jugar la final y que no lo haga Nole o ganar el título. La pugna continúa.