Nadal y Andújar, a por otro doblete español en cuartos
Este lunes, Nadal se enfrenta al croata Marin Cilic (01:00, Eurosport) y Pablo Andújar, al francés Gael Monfils (no antes de las 23:00, Eurosport).
Este lunes puede ser un gran día para el tenis español. Rafa Nadal y Pablo Andújar juegan en los octavos de final del US Open y si alcanzan los cuartos habrá un tercer doblete español en esa ronda de Grand Slam este año, tras las clasificaciones del propio Nadal y de Roberto Bautista en Australia y Wimbledon. En el torneo estadounidense ha ocurrido ya seis veces. La última reciente, cuando Pablo Carreño acompañó al balear en 2017. En las otras cinco destaca 2013, cuando jugaron por el pase a semifinales Nadal, Ferrer y Robredo. Y hay un dato casual muy positivo. En las dos ocasiones mencionadas (2013 y 2017) y en 2010 con la dupla Nadal-Verdasco, Rafa terminó con el trofeo en las manos.
Buenos augurios para una jornada que será complicada para sus protagonistas. Nadal se enfrentará a las 01:00 (Eurosport) al croata Marin Cilic (domina los duelos particulares el de Manacor por 6-2) y Andújar, no antes de las 23:00 (Eurosport), a Gael Monfils (3-0 para el francés), que apeó a Denis Shapovalov. El domingo los dos españoles se entrenaron a la misma hora, aunque en circunstancias diferentes. El número dos del mundo lo hizo con mucho público en su habitual pista de entrenamiento, la 1, con Carlos Moyá y Francis Roig como sparrings; mientras que el conquense se ejercitó en la cancha de juego número ocho, más discretamente y con la ayuda de su entrenador, el exjugador Carlos Calderón, y de un júnior con buenas maneras.
Hacía mucho calor cuando Andújar terminó su trabajo con la camiseta empapada. “Me encuentro bien, a ver qué pasa mañana (por hoy)”, dijo a AS. Había finalizado su sesión con unos cuantos saques, una faceta del juego importante para tener opciones ante Monfils. “Le conozco desde hace mucho, ya que somos del mismo año. Construye mucho la jugada y contra él, el partido será muy físico. Obviamente, no soy el favorito, pero intentaré hacer mi tenis y ser sólido. No tengo nada que perder y dispondré de mis opciones”, afirmó el sábado en rueda de prensa, antes de liberarse de cualquier presión: “No me merezco tenerla, no soy Nadal. Estoy en cuarta ronda, es un regalo”.
El balear, que sí carga con la responsabilidad de manera permanente, practicó mucho el drive con Roig como máquina de lanzar bolas. El efecto las enviaba siempre al mismo lugar, donde se amontonaban facilitando la labor de recolección, cerca del lugar en el que seguía su evolución el padre del ganador de 18 grandes, Sebastián. A Nadal, en realidad, le preocupa más el revés, como comentó en Eurosport: “Ya sabemos que el drive es el golpeo más importante. Si consigo tener una gran derecha y además el revés comienza también a funcionar bien, las cosas van mucho mejor en el transcurso del partido. Me está funcionando bien, aunque por momentos pienso que me falta un pelín para llegar al punto que busco. La exigencia de lo que viene seguro que me ayudará a seguir mejorándolo”. Esa exigencia ahora se llama Cilic, campeón en 2014.