Sascha Zverev salva una bola de partido y avanza a octavos
El alemán lo pasó muy mal para superar al bosnio Dzumhur, que tuvo una opción de ganar el partido con 5-4 y saque de Zverev. Su próximo rival será Pouille o Khachanov.
Alexander Zverev sigue avanzando en Roland Garros aunque su marcha está siendo un tanto renqueante en el torneo. En segunda ronda necesitó cinco sets para superar a Lajovic y este viernes se le ha atragantado otro balcánico, Damir Dzumhur, al que ha ganado también en cinco mangas y con mucho sufrimiento. Tanto que el alemán tuvo que levantar una bola de partido con 5-4 para el bosnio en el último parcial. Lo hizo y pudo respirar para terminar imponiendo su ranking y su categoría: 6-2, 3-6, 4-6, 7-6 (3) y 7-5. Alcanza por primera en su carrera los octavos de final del Grand Slam parisino, donde tendrá como rival a Pouille o Khachanov.
La victoria número 150 de Zverev en la ATP llegó con agonía y dudas durante la mayor parte del partido y se saca la espina de su eliminación en primera el año pasado a manos de Fernando Verdasco. Dzumhur, aguerrido y luchador, pero físicamente inferior al teutón, peleó con bravura y a punto estuvo de apuntarse una buena gesta. La Philippe Chatrier vibró con el desempeño de dos tenistas en lucha, que regalaron intercambios y puntos tremendos. E incluso una anécdota desafortunada cuando Dzumhur arrolló a un jovencísimo recogepelotas al intentar capturar una bola que caía del cielo tras golpearla con la caña.
Cada uno de los contendientes colocó 51 golpes ganadores y en errores no forzados también rivalizaron, aunque el alemán cometió unos pocos menos (68-73). Es la prueba de que jugaron a saco y de que Zverev está aprendiendo a manejar partidos duros a cinco sets en un gran torneo.
Thiem tumbó a Berrettini
Dominic Thiem sobrepasó las dos horas y media de partido para derrotar a Matteo Berrettini (6-3, 6-7, 6-3, 6-2). El número 8 del mundo comenzó mal, perdió su primer servicio, pero pronto se recuperó y gracias a dos break cerró fácil el primer set. Más complicado lo tuvo en el, cuando el italiano mostró su mejor juego. Ambos lograron igualarse en fallos y en el tie-break el 96 del mundo estuvo más atinado. Berrettini estaba cómodo y varios errores consecutivos le dejaron sin el tercer set. Con todo a favor, Thiem se vino arriba y ganó rápido la manga definitiva.