Garbiñe Muguruza amenaza ahora el reino de las Williams
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Garbiñe Muguruza tiene hoy (15:00, #0 y MD2) una segunda oportunidad de ser campeona en Wimbledon. Con 23 años, no ha tardado mucho en encontrarse con ella, solo dos temporadas después de jugar la final por primera vez y perderla. Fue en 2015, ante una intratable Serena Williams de la que se vengó en Roland Garros 2016, cuando la española levantó su primer trofeo en un Grand Slam. Estos tres éxitos, que muchas jugadoras tardan lustros en acumular y que ella ha conseguido en tan poco tiempo, le han instalado en la élite del tenis femenino. Esta tarde le espera otra Williams, Venus, que con 37 años aspira a su sexto campeonato en el torneo londinense. Entre las dos hermanas han ganado doce de los últimos 17 títulos. El All England Lawn Tennis Club es su reino.
A favor de Garbiñe juegan su juventud y su excelente estado de forma. Está más centrada que nunca, en un ambiente protegido y con un plan calculado que le ha ayudado a aislarse de todo lo que no es tenis. Respira competición y cuando no la tiene, descansa relajada con su equipo. Ve una película, escucha música, cocina...
El balance particular contra Venus lo tiene en contra (1-3), pero el último se lo apunto la española hace poco en Roma, aunque fue en tierra batida. “No tiene nada que ver, aquí ella se siente cómoda”, dice Muguruza.
Garbiñe ha estudiado a su rival y sabe lo que tiene que hacer. No puede decir lo mismo Venus, que tras vencer en las semifinales a Johanna Konta reconoció que no había visto ningún partido de su próxima contrincante durante el torneo. “No sé lo que está haciendo, honestamente, pero nunca nos hemos enfrentado en hierba y eso será un factor diferencial”.
Muguruza está a 46 títulos y 464 victorias de Venus, pero tiene 14 años menos. Las dos han cedido solo un set en esta edición de Wimbledon. La aspirante ha perdido 39 juegos y la pentacampeona, 50. El trofeo femenino, que se llama Venus Rosewater Dish (nada que ver con la finalista de hoy), espera en un choque de generaciones.