Álex de Miñaur logró en Sydney a sus 17 años la primera victoria en la ATP. Derrotó al francés Benoit Paire por 6-3, 3-6 y 7-6(1) y se convirtió en el segundo jugador de esta edad en conseguir una victoria tras Denis Shapovalov (a Nick Kyrgios en Toronto 2016). Un jugador que aún es el 333º de la ATP (su víctima Paire es el 46) y que ya está acaparando la atención del tenis aussie. Le apodan como 'The Demon' (El Demonio) y, tras lograr meterse en Brisbane desde la previa y empezar ganando en este torneo de Sydney, ha recibido una invitación para el Open de Australia.

Una esperanza del tenis australiano que bien pudo ser del español. De Miñaur, de padre uruguayo y madre española, nació en el país oceánico pero se trasladó a Alicante con 5 años, donde estuvo hasta los 13. En nuestro país empezó a destacar con la raqueta, pero no encontró los apoyos necesarios para seguir con su carrera, algo que sí logró en su país natal. Nada más llegar recibió una beca para poder compaginar estudios y deporte. Por eso no extraña que al ser preguntado no tenga dudas: "Me siento australiano".

En la segunda ronda del torneo de la ciudad que le vio nacer, De Miñaur, que recibe los consejos de compatriotas como Kyrgios o Tomic, se medirá a Kuznetsov mientras él seguirá viviendo un sueño, como ya le pasó en Brisbane, como comentaba al medio local 'Sydney Morning Herald': "Me cruzaba en los vestuarios con jugadores como Nadal o Nishikori... me parecía estar en la luna".