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TENIS | OPEN DE MALLORCA

Jankovic sufre ante Mertens pero se mete en los cuartos

Salvó un parcial de 0-7, para vencer a la belga Elise Mertens, por 0-6, 6-4 y 6-3 en dos horas y siete minutos. Se medirá a Cirstea.

La tenista serbia Jelena Jankovic devuelve una pelota a la tenista croata Ana Konjuh durante la ronda de hoy del Torneo Mallorca Open, que se juega en la localidad de Santa Ponsa, en Mallorca.
J. GRAPPELLIEFE

La serbia Jelena Jankovic, ex número uno del mundo, sobrevivió a una dura batalla contra la belga Elise Mertens, pero la canadiense Eugenie Bouchard cayó en la segunda ronda del Abierto de Mallorca ante la seguridad de la letona Anastasija Sevastova, que alcanzó los primeros cuartos de final sobre hierba de su carrera.

Con 30 grados y el césped de la pista central del Santa Ponsa Country Club convertido en un horno, Jankovic, segunda favorita, se recuperó a tiempo, salvando un parcial de 0-7 para vencer a Mertens, por 0-6, 6-4 y 6-3 en dos horas y siete minutos, y acceder a los cuartos de final.

"¿Qué hora es?, ¿cuánto tiempo he estado jugando?, ¿dos horas?. Casi me derrito", señaló Jankovic, exhausta, con varias tiras en sus piernas producto de un golpe mientras hacía pesas una semana antes.

Un día después de que otra belga, Kirsten Flipkens, eliminara a la primera favorita, la española Garbiñe Muguruza, Mertens estuvo a punto de dejar totalmente descabezado el torneo mallorquín.

La belga, 150 del mundo, había superado la fase previa del torneo y vencido en primera ronda del cuadro principal este martes a la italiana Francesca Schiavone en tres duros sets. Mertens luchó hasta la extenuación contra Jankovic, pero en el tercer set, donde tuvo ventaja de 2-0, sufrió una caída y chocó contra una de las sillas de los jueces de línea, golpeándose en la muñeca derecha.

Tratada en el intercambio por la fisioterapeuta del torneo con hielo y masaje, la belga no pudo a continuación mantener el ritmo que impuso Jankovic.

"Estoy satisfecha porque he sido capaz de ser más fuerte en el segundo set e incluso poder sacar cuando el sol me cegaba los ojos", comentó Jankovic. "Ella es muy sólida y toma mucho riesgos, y no comete muchos errores, y no te da nada. No es fácil en este tipo de pistas", añadió.

"En el pasado año he tenido buenos triunfos en estas superficies, vencí a Sharapova, en la final de Birmingham (2007), a Venus en Wimbledon (2006) y a Kvitova en Wimbledon (2015). Es decir he ganado a campeonas de esta superficie, lo que me ha demostrado que puedo jugar bien en hierba", dijo Ivanovic tras recuperar el resuello.

"Es más mental, sobre todo. Antes no me gustaban estas pistas, porque me daba miedo caerme y dudaba. En otras superficies no lo pienso y voy más a por el golpe", explicó. "Hoy jugué con zapatillas nuevas y volví a tener miedo de caerme y torcerme un tobillo, me sentía incómoda, y así pierdes puntos porque dudas y no quieres lesionarte, pero es así para todas", señaló la serbia.

Su próxima rival será la croata Sorana Cirstea, que se impuso a la eslovaca Daniela Hantuchova, por 6-3 y 6-4 en una hora y 14 minutos. La nativa de Bucarest, que suele entrenarse en Barcelona, ha salido de la fase previa del torneo mallorquín y parece convencida con su juego.

"Estoy en mi segunda carrera", dijo tras su victoria recordando las peripecias en forma de lesión que ha tenido en su hombro derecho a finales del 2014 y comienzos de 2015 que casi le hacen desistir.

Un paseo entre los rosales de los jardines del club, sirvieron para que Bouchard asimilara la derrota por 6-3 y 6-3 ante Sevastova, una jugadora a la que ganó con muchas dificultades a comienzos de este año en Doha, por 5-7, 6-3 y 7-6 (4), en el único enfrentamiento anterior.

La finalista en Wimbledon hace dos temporadas, empezó la temporada alcanzando las últimas rondas en Hobart y Kuala Lumpur, e hizo un torneo decoroso en Roma, logrando los octavos, pero después los resultados no le han acompañado, con derrotas en la segunda ronda de Roland Garros, y primera en la hierba de Hertogenbosch.

"No me encontraba bien antes del partido, y además nunca había jugado bien sobre hierba", dijo algo sorprendida Sevastova. "Es un territorio nuevo para mi", añadió la letona que viene de perder con la checa Karolina Pliskova en la primera ronda de Nottingham.

"Hay que ser muy sólida con el servicio, pero también con el resto. En tierra tienes más oportunidades. Pero en hierba cualquiera puede ganar a cualquiera", puntualizó.

Con tres jugadoras ya en cuartos, la última de la jornada de hoy saldrá del encuentro de esta tarde entre la colombiana Mariana Duque-Mariño y la alemana Sabine Lisicki.