Todos los deportes tienen un personaje. Y el tenis, y el periodismo, tenían en Bud Collins al suyo. El estadounidense falleció hoy a los 86 años, pero el colorido de sus pantalones, hechos a medida y de los colores más chillones posibles, seguirán iluminando el circuito.

El estadounidense, que se definía como "escribidor y charlatán", falleció a los 86 años en su casa de Brookline (EE UU). Detrás queda su trabajo como columnista en The Boston Globe y comentarista de televisión para NBC, ESPN o Tennis Channel. El centro de prensa del US Open lleva su nombre, y el Salón de la Fama del Tenis de Newport le abrió sus puertas como si de un jugador se tratara. En su más de medio siglo por las canchas de todo el mundo, vio a los mejores. Y los mejores le respetaron. "Sólo el mejor Borg ganaría a Nadal en tierra", dijo en una entrevista a AS.

Bud Collins dejó libros como La educación de un jugador de tenis (escrito junto a Rod Laver), Mi vida con los profesionales o La Enciclopedia moderna del Tenis. El tenis pierde al decano de los periodistas, y mucho color.