Andy Murray, cuarta final en Melbourne ante Djokovic
El británico se llevó la victoria ante Raonic tras un intenso duelo que se decidió en cinco sets (4-6, 7-5, 6-7, 6-4 y 6-2). En la final del domingo se medira a Novak Djokovic.
Una durísima victoria sobre Milos Raonic, después de cuatro horas, cinco sets... y 23 'aces' firmados por Raonic deposita a Andy Murray en su quinta final del Abierto australiano y novena en Grand Slam. El tanteo fue de 4-6, 7-5, 6-7 (4), 6-4 y 6-2. En la final, a las 09:30 horas de la mañana del domingo, Murray chocará con Novak Djokovic, el hombre que le venció aquí mismo en las finales de 2011, 13 y 15, y que en estos momentos, además de implacable, se antoja inaccesible, inatacable e intratable.
Por añadidura, Murray llegará al partido definitivo del evento australiano con el castigo añadido de haber agrupado más de siete horas y media en pista ante Ferrer (cuartos) y en esta semifinal, segunda en Grand Slam en toda la carrera de Raonic. Pero Murray fue uno de los tres jugadores que pueden presumir de haber ganado a Djokovic en 2015: y además fue en una final, la del Masters 1.000 de Canadá.
Por momentos, y desde un 'break' favorable de salida, Raonic (que ha estrenado en Melbourne el asesoramiento técnico de Carlos Moyá) pareció ganador de un partido en el que el canadiense/montenegrino mandó hasta mediados del cuarto set, cuando ya había tenido que visitar el vestuario para ser atendido de lo que pareció un problema en la ingle derecha. Entre cuarto y quinto sets, Raonic ya recibió asistencia en pista, con fuertes masajes del 'trainer' de la ATP dirigidos a la zona de la ingle derecha.
Con punta de servicio a 233 km/h, y media de primeros saques a 210 durante casi todo el partido (se acabó estabilizando en 205, tras el problema en el muslo), Raonic fue empujando a Murray contra las vallas. Con el partido convertido en una batalla de trincheras (ambos jugadores discutieron acremente con el árbitro estadounidense Jake Garner, por decisiones controvertidas), el escocés necesitó de toda su experiencia en los grandes escenarios para terminar saliendo a flote. La estadística más decisiva es la de errores no forzados: Raonic, 78... y Murray, 28. Raonic (solo 44% de puntos con segundos saques) sí conectó 72 tiros ganadores, incluidos esos 23 'aces', contra 38 de Murray: nueve saques directos.
Al margen, el triunfo permite a Murray (5/16 en puntos de rotura a favor) mantener el segundo puesto en la Lista de la ATP, que hubiera cedido a Federer en caso de no haber accedido a la final y defender así sus 1.200 puntos de 2015. Como dice el propio Carlos Moyá, "en este juego se trata al final de no complicarse la vida".