Nadal se cita con Djokovic en la semifinal de este sábado
El tenista español no logra vencer al número uno del mundo, segundo de su grupo en Londres, desde que lo hiciese en la Masters Cup 2010.
El límite y la gran prueba de fuego están en Novak Djokovic. El regreso de Rafael Nadal a las máximas alturas del tenis ATP se mide con la prueba más dura: el ogro arrollador que es el número uno mundial, cuatro veces campeón de la Masters Cup (incluidas las ediciones entre 2012 y 2014)... y al que solo Roger Federer ha podido derrotar desde el pasado agosto hasta esta misma Masters Cup.
Con Nadal ya en semifinales desde el miércoles como líder del Grupo Nastase, Djokovic selló ayer el billete que le hará chocar mañana con Rafa al llegar a semifinales como segundo del Grupo Stan Smith. Federer certificó su liderato y Djokovic solo necesitaba un set ante Berdych... al que batió sin brillantez por 6-3 y 7-5.
Desde su rotunda derrota ante Federer, el martes, Novak Djokovic ha venido emitiendo señales de cansancio mental y físico; de todo, menos frescura. Pero al emergente Nadal aún le toca salvar un muro mental y estadístico (Rafa acepta que Djokovic juega “otra liga”) si quiere someter a esa pesadilla serbia que de tantos templos sagrados le ha expulsado (Roland Garros en este mismo 2015, por ejemplo), y de tantos sagrados griales le apartó.
Nadal no vence a Djokovic desde la final de Roland Garros en 2014. Ese fue el único combate -aunque bien trascendental- que Novak cedió a Rafa de los ocho últimos que libraron hasta aquí: es 7-1 para Djokovic desde la final del US Open de 2013. Ese fue un gran éxito para Nadal que no bate al número uno en pista cubierta desde hace cinco años exactos: en la Masters Cup de 2010. En los tres duelos de este 2015 tan crítico para Nadal se han registrado claras victorias de Djokovic: Montecarlo, Roland Garros (ambas en tierra batida, en dos santuarios de Rafa) y al fin, en la final de Pekín, donde Nadal ya parecía ir recuperando las buenas sensaciones que ha confirmado en esta Masters Cup.
Pero este Nadal de Londres (que hoy debe firmar un trámite con Ferrer, a las 15:00 horas) tiene poco que ver con aquel de primavera en Montecarlo y París: y Federer ya ha expuesto las grietas en el blindaje de Djokovic. ¿Quién dijo miedo?