Rafa Nadal lucha ante Jo-Wilfried Tsonga por otra final
Se exhibió ante el suizo, sus sensaciones son cada vez mejores y con esta victoria el manacorí firma su presencia en la Masters Cup de Londres. Su próximo rival: Tsonga.
Hasta llegar a Asia, Rafael Nadal no había jugado ninguna final sobre pista rápida en 2015... ni tampoco había batido en este año a un Top Ten sobre superficie dura. El paso a la final en Pekín ante Djokovic rompió la inercia. Y ayer, la victoria por KO ante Stan Wawrinka en cuartos del Masters 1000 de Shanghai coloca a Rafa en la semifinal de hoy (10:30 horas) ante Jo-Wilfried Tsonga (cara a cara van 8-3 para Nadal), a la caza de su segunda final sobre hard courts, las pistas duras, en una semana.
Pegándole a la bola como si esta fuese una estera, reluciente en concentración y resplandeciente en juego, Nadal arrolló a Wawrinka (cuarto jugador mundial) en el QiZhong Stadium, en solo 63 minutos: 6-2, 6-1. Nadal ganó diez de los once últimos juegos (parcial de 10-1 para cerrar). Es la primera victoria de Nadal sobre el número dos suizo en dos años casi exactos, desde la Masters Cup de 2013. Sus dos últimos cruces hasta este viernes, la final de 2014 en Australia y los cuartos del Masters 1000 de Roma en 2015, se saldaron con graves derrotas de Rafa, sendos reveses que pasarían dura factura mental y física a Nadal.
Esta fue también la victoria número 300 para Rafa en un Masters 1000: le deposita automáticamente en la Masters Cup de Londres, del 16 al 22 de noviembre. Y este lunes, Rafa Nadal ya saldrá quinto en la clasificación del año, después de que Tomas Berdych se inclinara ante un imponente Murray: 6-1 y 6-3. El escocés se medirá a Djokovic (ganador de Tomic, 7-6 y 6-1) en la segunda semifinal: es el número dos frente al número uno.
Wawrinka, en apariencia más delgado, apareció en cuartos tras pasarse casi tres horas en pista ante Marin Cilic. Así que Stan The Man, Stanimal, intentó gobernar a tiro limpio, con el craack metálico de sus derechas planas... que Nadal controlaba sin esfuerzo, gracias a cambios de dirección y liftados altos, más buenos drives paralelos: en el sexto juego apareció la primera rotura, con un Nadal motivadísimo, que picaba espuelas a lomos de los deseos de revancha. Con 2-0 en el segundo set, Wawrinka jugó un 0/30 favorable bajo el servicio de Nadal. Pero el acorazado Rafa (73% en primeros saques) canceló la intentona con un variado arsenal de servicios.
Tsonga. En el primer turno de cuartos, Tsonga (actual número 15 de la ATP) había sufrido durante 161 minutos y tres sets bajo el látigo del cañonero Anderson y sus 17 saques directos (Tsonga firmó 15 aces). Luego, Rafa Nadal hizo estallar las defensas de Wawrinka: a base de trallazos masivos. Desde el 2-2, Wawrinka (17 errores no forzados en el primer set, falto de movilidad lateral) solo ganaría un juego más. En un galope con alas de fuego, Nadal encadenó nueve juegos seguidos ante un Wawrinka grogui. ¿Y contra Ali Tsonga?