ROLAND GARROS
Se hunde Ivanovic y Safarova se cuela en su primera final
La serbia, campeona del torneo en 2008, mandaba por 5-2 pero se fue del partido y permitió que la checa se metiera en el partido y al final remontara.
En un 'shock' colosal, Ana Ivanovic se hundió sin paliativos y clavó un puñal en el corazón de su 'sweetheart' o amorcito, Bastian Schweinsteiger, el futbolista internacional del Bayern Múnich. La serbia, número siete del WTA Tour y de Roland Garros, campeona del torneo en 2008, mandaba por 5-2 ante la checa Lucie Safarova en el primer set, pero en una de sus ya no tan frecuentes salidas mentales, Ivanovic permitió a la zurda Safarova (número 13 del WTA Tour) cobrar vida e imponer su metódico sistema de tiros planos y angulados. El canadiense Rob Steckley, reciente entrenador de Safarova está tras el guión de ese sistema. Ivanovic pagó caro su desventurado colapso mental: Safarova salió de estampida rumbo a un parcial favorable de 5-0 que le concedió el primer set por 7-5 y fue como una losa de granito sobre la débil moral de Ivanovic. Pese al sólido apoyo en el palco de 'Schweini' Schweinsteiger, la serbia entregó los juegos finales de la decisiva primera manga tras una cadena de dobles faltas (cinco en total) y errores no forzados: 35 durante toda la semifinal, por 31 para Safarova, que dominó con solidez en tiros ganadores: 36-25.
Cuando Safarova cerró el set inicial, el desenlace quedaba poco menos que sellado: ante una Ivanovic sombría y al borde del llanto, la zurda de Brno que fuese pareja de Tomas Berdych ya tenía en su raqueta más de medio pasaporte para su primera final de Grand Slam (hasta este 2015 en París, Safarova solo había jugado en Grand Slam una semifinal en Wimbledon)... y el pasaporte para esa final del sábado se expidió con marcador de 7-5 y 7-5 en hora y 52 minutos. Pero tampoco fue sin un amago de melodrama: Safarova servía con 5-4 para cerrar el partido cuando le pudieron los nervios y, en pleno ataque de tensión, cometió tres dobles faltas en ese mismo juego, una de ellas en el primer 'match point'. Ivanovic consiguió así el 5-5, pero ya no quedaba mucho más recorrido: más relajada, ya con menos tensión y con facilidad extrema, Safarova (4/7 en puntos de 'break') volvió a quebrar de vuelta y remató set y partido con 7-5 al tercer 'match point'.
"Es un sueño que se ha hecho cierto y todavía no puedo creer, dijo Safarova. "He empezado lenta y a bajo nivel pero intenté subir la agresividad y mantenerla. Esa era la única manera en que podía ganar", dijo Safarova después de haberse arrodillado sobre la arena roja de la Chatrier. Ya instalada en la final, Lucie Safarova espera el nombre de su rival en la tarde del sábado: será Serena Williams o la suiza Timea Bacszinszky, que se cruzan a continuación en la segunda semifinal.