Guillermo García-López sorprendió al francés Gael Monfils en las semifinales del torneo de Bucarest y se citó en el definitivo duelo por el título con el checo Jiri Vesely, quien derrotó a Daniel Gimeno-Traver y evitó una final española. 

Remontó García-López, quinto cabeza de serie, para confirmar su presencia en una nueva final, tras la disputada y ganada el pasado mes de febrero en Zagreb al italiano Andreas Seppi.

Fue Monfils quien se adjudicó el desempate que resolvió el primer set por 6-7 (2), pero el tenista nacido en La Roda (Albacete) se rehizo para igualar el duelo (6-4) a continuación.

Solo dos de los seis encuentros entre García-López y Monfils habían caído anteriormente del lado del español, que en Bucarest buscará agregar contra pronóstico un quinto título a su palmarés tras los conseguidos en Kitzbühel (2009), Bangkok (2010), Casablanca (2014) y Zagreb (2015).

Después de cerrar el encuentro con el definitivo 6-2 tras dos horas y diez minutos de disputa y reforzado por el prestigioso triunfo conseguido ante el decimoquinto en la clasificación de la ATP, García-López retará en la final al checo Jiri Vesely, campeón del torneo de Auckland (Nueva Zelanda) y séptimo cabeza de serie, que doblegó por 2-6, 6-1 y 6-4 al español Daniel Gimeno-Traver en la primera semifinal.

El jugador valenciano, que afrontó el encuentro de semifinales con un 2-0 favorable en su particular cara a cara, desaprovechó la ventaja obtenida en la primera manga (2-6) y vio cómo su oponente le negaba el acceso a su tercera final de la temporada tras las logradas en Casablanca (Marruecos) y Bucaramanga (Colombia).

Por 6-1 y 6-4 se adjudicó Vesely el segundo y tercer set para certificar la remontada tras una hora y 43 minutos de disputa.