ATP 500 RÍO DE JANEIRO

Ferrer supera a Mónaco, al calor y a la pegajosa humedad

El número nueve del mundo se colocó a las puertas de luchar por su segundo título del año, tras el de Doha, tras batir al argentino, con 35º, por 6-3, 4-6 y 6-2.

Ferrer, en su partido contra Mónaco.
Antonio Lacerda
Jesús Mínguez
Nació en Guadalajara en 1973. Licenciado en Periodismo por la Complutense. En AS desde el año 2000, es redactor jefe de Más Deporte. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos y unos Paralímpicos, Grand Slams de tenis, Davis, Laureus, candidaturas olímpicas, política, dopaje o grandes combates de boxeo. Le gusta escribir de deporte y también practicarlo.
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Bajo un sol ardiente, que elevó el termómetro hasta los 35º grados, y entre una humedad pegajosa, David Ferrer selló el pase a las semifinales del ATP 500 de Río de Janeiro. “Estoy contento pero cansado...”, se sinceró tras abrochar un partido muy duro ante Juan Mónaco, que acabó claudicando tras dos horas y tres minutos por 6-3, 4-6 y 6-2. Su rival por un puesto en la final será el austruiaco Haider-Maurer, quien se impuso al brasileño Joao Souza por 7-6 (4), 1-6 y 6-4.

“Mónaco hizo un partido de mucho ritmo al final del segundo set e inicio del tercero, pero pude aguantar”, explicó el número nueve del mundo, al que sacaron de apuro sus 17 winners y la capacidad para salvar cinco de las siete oportunidades de break de que dispuso el argentino. Ferrer convirtió cuatro de cinco. El de Jávea se colocó a las puertas de la disputa de un segundo título del año, tras ganar el de Doha.

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