WIMBLEDON | FINAL FEMENINA
Petra Kvitova arrasa y firma su segundo título de Wimbledon
La zurda checa venció a Eugénie Bouchard en tan solo 55 minutos por un claro 6-3 y 6-0. Kvitova gana un título que ya logró en 2011 ante Maria Sharapova.
El arsenal completo de la zurda checa Petra Kvitova estalló sobre Eugénie Bouchard, la primera canadiense (de ambos sexos) en una final de Grand Slam… y Kvitova se alzó con su segundo título de Wimbledon en sólo 55 minutos (aunque no fue la final más corta): 6-3, 6-0. La potente checa de 1,82 desencadenó sobre ‘Génie’ Bouchard, el nuevo prodigio de mercadotecnia, exactamente la misma variedad de tiros profundos, cortados y angulados que cayó sobre Maria Sharapova en la final de 2011, cuando Kvitova firmó su primera conquista en Wimbledon. Se trata de la final más rápida en los últimos 31 años, desde 1983, cuando Martina Navratilova atomizó por 6-0 y 6-3 en 54 minutos a la estadounidense Andrea Jaeeger. Con el paso de los años, Jaeeger aseguró que había "regalado" aquella final, por un grave problema personal con Navratilova en la víspera del partido.
En presencia de campeones como Jack Nicklaus, la misma Martina Navratilova, Conchita Martínez, Jana Novotna o Marion Bartoli, Kvitova dictó el juego sin contemplaciones desde un break de salida… y terminó ganando los últimos siete juegos del cuadro femenino de Wimbledon 2014. Kvitova encadenó cuatro saques directos (uno, a 181 km/h) y apabulló en la diferencia final de puntos ganados: 61-37. Fue un error si el WTA-Tour, la organización que controla el circuito femenino, esperaba lanzar a Bouchard desde esta final hacia las cotas máximas del estrellato. Con las Williams ya bastante más allá de la treintena y ya jubiladas jugadoras como Bartoli, Henin, Mauresmo, Hingis o Clijsters, el glamour del circuito femenino necesita algo más que el barniz de marketing que ‘Génie’ Bouchard aporta. El lunes, Kvitova saldrá en el número 4 del mundo y Bouchard en el número 7.
El Duque de Kent, Presidente del All England Club, ofreció los trofeos en la Centre Court… aunque hubo que esperar a que se cerrara el techo por la amenaza de lluvia, de forma que las jugadoras fueron a vestuarios cuando terminó el partido… y después regresaron para la cita con el Duque de Kent, de quien Kvitova recibió por segunda vez la bandeja 'Venus Rosewater Dish', el trofeo de campeona en Wimbledon. "Este es un paso más en la dirección correcta y no sé si hoy merezco vuestro cariño", dijo Bouchard al público: con mucha timidez. Se le respondió con un gran aplauso. "No sé si este trofeo es más especial que el primero, lo que sí sé es que volver a ganar aquí es algo fascinante", musitó Kvitova, al borde de las lágrimas... y con la Venus Rosewater Dish bajo el larguísimo brazo...