Feliciano y Bautista, dos títulos sobre hierba en un solo día

El sábado del solsticio de verano deparó una situación insólita y victoriosa para el tenis español: casi a la misma hora, Roberto Bautista Agut (Hertogenbosch) y Feliciano López (Eastbourne) firmaban sendos títulos ATP sobre pistas de hierba. Lo nunca visto. Y eso, cuando ya está todo listo para la apertura de mañana en el All England Club, sagrado santuario de la hierba: en Wimbledon.

Después de Manuel Santana, Rafa Nadal, Andrés Gimeno, David Ferrer y el propio Feliciano, Roberto Bautista es el sexto español que conquista un título oficial sobre hierba… y el primero en su carrera profesional. En el mediodía nublado y ventoso de Hertogenbosch, cerca del Canal de la Mancha, Bautista se sobrepuso a los 13 saques directos del alemán Benjamín Becker y, con tiros planos, domó a Becker en dos horas menos seis segundos: 2-6, 7-6 (2) y 6-4. Era el tercer partido extendido a tres sets que Bautista jugaba en poco más de 24 horas: con seis sets en la jornada del viernes. “Me hizo falta un poco para recuperarme de un viernes tan largo”, analizó Bautista tras atrapar esa corona de Hertogenbosch (‘El Bosque del Duque’, en español).. que Ferrer alzó en 2008 y 12. Bautista sale de Holanda entre los 25 primeros del mundo.

Justo al terminar Bautista, y ya al otro lado del Canal, en Eastbourne, Sussex, Feliciano López abría la defensa del título que ganó allí mismo al francés Simon, en 2013: a menos de cien metros del mar, en Devonshire Park. Allí, en 1972, fue campeón Andrés Gimeno. Ahora, ‘Feli’ lo hizo de nuevo ante otro francés, Richard Gasquet, número 14 del mundo… y un semifinalista en Wimbledon 2007. Con la dinamita de 14 saques directos, López demolió a Gasquet en 133 minutos: 6-3, 6-7, 7-5. Feliciano jugaba su segunda final en una semana, tras Queen’s… y quebró cuatro veces el saque de Gasquet. “Nadie es especialista en hierba, porque nadie se entrena habitualmente en hierba. Uno tiene que querer jugar bien en todas las superficies y adaptarse, como yo hice”. Lo dice el campeón de Wimbledon en 2008 y 10: Rafael Nadal Parera.