Roland Garros
Taylor Townsend: la esperanza de Estados Unidos pesa 80 kilos
De júnior vetaron su participación en un US Open por causa de su excesivo peso. Hoy se enfrenta a Carla Suárez en tercera ronda en el segundo turno de la Pista 1, hacia las 14:00.
En 2012, la Federación de Tenis de EE UU vetó la participación en el US Open júnior de ese año a Taylor Townsend, zurda, afroamericana y nacida el 16-4-1996, en Chicago. La razón específica: el peso de Townsend, que siempre ha oscilado en torno a un mínimo de 80 kilogramos para una altura en torno a 1,65.
En aquel 2012, Townsend era la número uno mundial en su categoría, donde ese mismo año había ganado el Abierto de Australia (con 15 años, saques y voleas) y había sido finalista en Wimbledon: todo, a las órdenes de Patrick McEnroe, director del Programa de Entrenamiento de Jóvenes. El mismo McEnroe que usó estas palabras para apartarla del US Open: “Número uno, nuestra preocupación es la salud de Taylor a largo plazo… y después su desarrollo como jugadora, también a largo plazo, para que pueda ganar el título absoluto en la Pista Arthur Ashe: cuando llegue su momento”.
En rebeldía. “Es una tragedia que se aparte a alguien de jugar un torneo como este sólo por su peso”, explotó Serena Williams. Todo estalló cuando Townsend no obedeció y se inscribió en el torneo. La USTA se negó a pagarle el viaje. Con el apoyo de su familia (el padre es director de instituto, en Chicago), la jugadora rompió con la Federación y con Patrick McEnroe para pasar a entrenarse con Zina Garrison, finalista en Wimbledon en 1990. El vínculo entre Townsend y Garrison ya no se ha roto. En los descansos de los partidos, Taylor lee una agenda que Garrison le suministra “con notas y aclaraciones”, aclara la zurda de Chicago.
Y casi dos años después de la controversia de 2012 y de la mano de Zina Garrison, Taylor Townsend es la penúltima esperanza de EE UU en estos Internacionales de Francia. Es la jugadora más joven en dieciseisavos de París desde 2009 y la más joven estadounidense en tercera ronda desde 2003. Ahora, Taylor ha perdido algo de peso para no fracturar la barrera de las 175 libras: siempre en torno a 80 kilos. Ella y Sloane Stephens, otra tenista afroamericana hija de un exjugador de Dallas Cowboys, son las dos últimas representantes de EE UU en el cuadro absoluto femenino. Hoy la potencia de Taylor se mide con el revés de Carla Suárez. Será en el segundo turno de la Pista 1, hacia las 14:00 horas. Y será digno de ver.