Novak Djokovic se negó a entregar ya a Rafa Nadal el número uno, algo que habría ocurrido de perder frente a Sam Querrey en cuartos de final. Lejos de ello, recetó un 6-1 y 6-2 al estadounidense . El número 30 del mundo fue un muñeco para el serbio, que no cedió ni una sola bola de break en todo el partido y elevó su porcentaje de puntos ganados con primer servicio al 89% y con segundos al 78%. Sin margen de error y vestido de rojo, el color de la suerte en China, donde también rivaliza en popularidad con Nadal al haberse proclamado campeón en Pekín en 2009, 2010 y 2012.

Djokovic perderá su condición de mandamás del tenis si Nadal gana a mañana a Berdych (06:30, Canal+Deportes). Él tendrá una cita en semifinales (13:30 horas) con Richard Gasquet. El galo puso en evidencia que David Ferrer no está fino en el tramo final del año y le derrotó por 6-3 y 6-4. El de Jávea encadenaba cinco victorias frente al de Béziers hasta que tropezó en cuartos del US Open. En Pekín tampoco pudo con él, pero se va con 90 puntos más que le servirán para cercar el número tres de Andy Murray, que ha cortado su temporada por lesión.