ABIERTO DE PEKÍN
Si Novak Djokovic pierde hoy, Rafa Nadal ya es número uno
El español selló su pase a los cuartos de final del torneo de tenis de Pekín, con una trabajada victoria por 6-4 y 7-6(3) ante el alemán Philipp Kohlschreiber.
A 17 grados y con 41% de humedad relativa, Nadal batió por 6-4 y 7-6 a Kohlschreiber tras quejarse del “bote lento y bajo” de las bolas en la Diamond Court del National Tennis Stadium de Pekín. Nadal también denunció la ‘lentitud’ de los recogepelotas. La demora en el servicio costó a Rafa una amonestación (warning), la pérdida de un primer saque que se convirtió en segundo, y un par de discusiones con el árbitro. “Ya que me mira tanto a mí, preste atención también a los recogepelotas y al bote de las bolas. Bota lento, bajo… y yo intento ir todo lo rápido que puedo. Esta regla no es buena para el tenis y usted no lo entiende bien”, dijo Nadal.
Nadal despachó en 52 minutos el set inicial, al primer set point, tras disfrutar de ventajas de 2-0 y 3-1. Pero Kolli Kohlschreiber recuperó los dos breaks sufridos en los juegos segundo y cuarto… hasta que Nadal, con problemas ante el revés y los tiros planos, sentenció la manga con otro break en el juego décimo, cuando Kohlschreiber tiró demasiado profunda una derecha al revés de Rafa. Tras doce duelos directos, ambos se conocen a la perfección. La pegada plana de Kohlschreiber tenía un plus de mordiente con los botes bajos.
En el segundo set se invirtió la situación… y no se produjeron breaks: aunque Nadal salvó, con 1-1, tres puntos de rotura. Rafa conectó un total de tres saques directos y ganó el 79% de puntos con su primer servicio. (Kohlschreiber, uno y 88%, respectivamente). En la muerte súbita, Nadal deshizo el tiebreak pegando desde el primer punto a la desesperada, casi como un condenado. Kohlschreiber tuvo ventaja de 2-1 en ese tiebreak… pero Nadal ganó los cinco puntos siguientes y resolvió el encuentro al segundo match point, con un sensacional passing de revés paralelo. Se trata de la victoria consecutiva número 24 de Nadal en pista dura en 2013. A partir de ahora, si Djokovic (juega hoy con Verdasco) pierde un partido, Nadal firmaría el número uno mundial... O también le vale, matemáticamente, llegar a la final.