Granollers, campeón tras remontar ante Mónaco

En el Kitzbühel Tennis Club, a 762 metros de altitud y en los Alpes del Tirol, Marcel Granollers se apuntó su primer título en 2013 al batir en la final del antiguo Open de Austria al argentino Juan ‘Pico’ Mónaco: 0-6, 7-6 (3) y 6-4 en dos horas y 12 minutos. Dirigido por Fernando Vicente, y tras superar una molesta tendinitis en el hombro derecho con horas intensivas de gimnasio, Granollers sucede en el palmarés del veterano evento de Kitzbühel a campeones españoles del calibre de Corretja, Albert Costa, Manolo Orantes… e incluso Manolo Santana: además de Roy Emerson.

Tras no ganar un solo juego en la primera manga, que cedió en sólo 23 minutos ante la solidez de Mónaco, Granollers salvó el segundo set (donde dominaba por 5-3) con un decidido juego de ataque en la muerte súbita. Ese 7-6 para Granollers en el segundo set, tras 57 minutos de batalla, vació el tanque de energías y moral de un Mónaco que tuvo control en los peloteos de fondo hasta que la altitud, las rachas de viento y el calor pasaron factura: entonces, y tras consolidarse sobre la arena roja de Kitzbühel en la segunda manga, Granollers se lanzó al ataque con buenas subidas a la red y servicios con punta de 207 km/h que terminaron por desarticular el juego de fondo del argentino, actual número 31 del mundo y campeón de este torneo de Kitzbühel en 2007.

Granollers conectó en total nueve saques directos (con 65% de puntos ganados con primeros servicios) por cinco de Mónaco, que firmó el 66% de puntos con primeros saques. Curiosamente, el argentino, aunque perdió el partido, ganó más puntos que Granollers: 93-82. Pero Granollers escapó con 4-0 en el set definitivo, donde jugó (y perdió) tres puntos de partido con 5-2 y 0-40 bajo el servicio de Mónaco. Tras altibajos con su servicio a causa del viento y la presión, Marcel acabó sentenciando el torneo al cuarto ‘match point’, cuando forzó a Mónaco a volear muy largo un ataque suicida y a quemarropa.

Mónaco, buen amigo de Rafa Nadal, ha establecido ahora su base de entrenamiento en Mallorca, bajo las órdenes de su nuevo técnico, Damián Patriarca que sustituyó en primavera al controvertido e infatigable Gustavo Marcaccio. Granollers, actual número 53 de la ATP, pasará ahora a ocupar puesto en torno a los 35 primeros. “Marcel jugó un excelente partido de ataque, se adaptó bien tras el primer set a las circunstancias y al escenario, y ha sido un justo vencedor”, razonó Mónaco.