Tenis | Masters Cup
Federer aplastó a Nadal, que decidirá ante Tsonga
Roger Federer se mostró a un nivel estratosférico y totalmente inaccesible para Rafa Nadal sobre la moqueta del O2 Arena londinense. Federer, que despachó a Nadal por 6-3 y 6-0 en sólo 61 minutos, ya está en semifinales. Y Nadal debe jugarse su clasificación mañana: ante Tsonga.
David Foster Wallace, DFW, el depresivo autor estadounidense que se suicidó en 2008, tituló uno de sus mejores ensayos en The New York Times de este modo: "Roger Federer como una experiencia religiosa". Místico seguidor del gran Federer, Foster Wallace decidió ahorcarse en septiembre de 2008, poco después de que los bíceps de Nadal empujasen a Federer fuera de su altar de Wimbledon.
En síntesis, Nadal se le presentaba a DFW como una némesis o Anticristo. "La muerte de Federer como Dios a manos de Nadal fue una de las cosas que acabó matando a Foster Wallace, al hacerle perder toda fe en la redención", escribieron algunos cuando DFW cometió suicidio, hace tres años. Ahora ha salido la obra póstuma de Foster: "El Rey Pálido".
Experiencia religiosa, héroe místico, rey pálido y algunas cosas más fue Roger Federer ayer para Rafa Nadal: todo, bajo la magnífica, escultural fotografía de las lentas cámaras de alta definición. Precisamente en Londres, Federer aplicó el bisturí a Nadal y destripó su juego. Donde esté, Foster Wallace debe haber sentido algo parecido a una redención.
Bote. Federer liquidó a Nadal con determinación tan sumaria como extraña: 6-3, 6-0. Roger cerró con parcial de 10-1 y 28 golpes ganadores por... cuatro de Nadal, que no dispuso de una sola bola de break. El bote bajo de la moqueta del O2 Arena reducía a blanda esponja esos adoquines de derecha con los que Nadal suele torturar el revés de Federer: los tiros de Rafa iban a altura ideal para Roger, que pegaba a bote pronto de derecha y revés: con limpieza y posición.
El martirio de Nadal terminó en 61 minutos. Federer se clasificó automáticamente para semifinales. Tras la despedida de Murray, Roger puede recobrar el número tres del mundo si revalida el título de 2011. También haría plusmarca de títulos de Masters Cup: seis. ¿Y Nadal...? Mañana se juega ante Tsonga el pase a semifinales. Se acabaron las experiencias religiosas. Toca luchar.