Alexandr Dolgopolov, arte, misterio y desorden, firmó otra de sus obras inacabadas. Esta vez, dar la pincelada final tenía el premio de los cuartos de final del US Open eliminando al número uno. Tras disponer de cuatro bolas de set en la muerte súbita del primero, el talentoso ucranio de 22 años dejó que el tirano del circuito, Novak Djokovic, se adjudicara una manga que se decidió por 16/14. De haber ganado el set el ucranio, el panorama pintaba muy distinto. Al final del partido, 7-6 (14), 6-4 y 6-2 tras dos horas y 26 minutos.

Dolgopolov (23º del mundo y que estrenó su palmarés en Umag) exigió lo mejor del serbio en el primer parcial con su estilo heterodoxo, su revés a una mano, sus subidas a la red y sus dejadas imprevisibles. Djokovic celebró la victoria en el tie-break como si estuviera Nadal delante. Pasó momentos de enorme agobio.

En cuartos, Djokovic, que tiene ya un parcial de victorias de 61-2 este año, se enfrentará a su compatriota Janko Tipsarevic, al que domina 2-0 en el cara a cara. Es la primera vez en la Era Open que dos serbios están entre los ocho mejores de un Grand Slam. La chinita en el camino del ogro Nole era Dolgopolov. Y la apartó con un puntapié tras tropezarse con ella en un set emocionante y brillante. Son los décimos cuartos de final consecutivos en un Grand Slam del genio de Belgrado.