Su vida en Wimbledon | La intrahistoria
Compra en el supermercado y cocina sus propios platos
Desde 2005, Nadal no pisa la habitación de un hotel cuando juega Wimbledon. A partir de 2006, el equipo de Rafa se decantó por la opción de alquilar casa en las proximidades del All England Club. Como las cosas (y las casas) fueron saliendo bien desde 2006, el formato se ha mantenido. Al iniciar este ciclo, Nadal compartía residencia con Feliciano López, pero ya tampoco es así: desde hace varios años, en casa de Rafa se alojan sólo su equipo técnico y su entorno familiar más cercano.
"Cuando la prioridad es entrenar, tener casa cerca del club es un avance muy grande en un torneo donde hay tantos problemas por la lluvia", observa Rafa, que suele cocinar casi a diario (es experto en marisco y arroz) y también va a hacer la compra en los supermercados de Wimbledon, dentro del riguroso sistema de turnos establecido por la familia Nadal: ayer le tocaba a su padre, Sebastiá. Por circunstancias, Nadal no repite esta experiencia de tener casa propia en ninguno de los otros torneos del Grand Slam: "En Nueva York, por ejemplo, sería imposible por las distancias; en Australia y Roland Garros, los hoteles están bastante cerca y hay menos problemas de lluvia". Nadal apenas corre por las calles semiselváticas de Wimbledon: "Salir a correr no me entusiasma; prefiero las elípticas".