El español Feliciano López, reciente finalista del torneo de Belgrado, donde perdió ante el número dos del mundo, el serbio Novak Djokovic, remontó ante el canadiense Milos Raonic (4-6, 7-6(2) y 6-4) para situarse en la segunda ronda del Masters 1000 de Madrid, donde se enfrentará al suizo Roger Federer.

Feliciano sacó adelante un partido complicado ante una de las revelaciones del circuito. Raonic, entrenado por el español Galo Blanco, ha irrumpido con fuerza en el presente año. Dotado de un gran servicio -firmó 23 saques directos ante López- dispone de un solvente juego de ataque. Sin embargo, a sus veinte años, este gigante de 196 centímetros, aún sufre en tierra.

El tenista español, que cedió el primer set, rentabilizó su mejoría en el segundo para salir victorioso del envite en la manga definitiva, después de algo más de dos horas de partido.

Feliciano, 39 del mundo, jugará en segunda ronda ante el suizo Roger Federer al que nunca, en las siete ocasiones en las que se han enfrentado, ha conseguido vencer.

El español acompaña a Marcel Granollers, el otro español que superó en esta sesión la segunda ronda. Ganó al ruso Nikolay Davydenko, reciente ganador en Múnich, por 7-5 y 6-2, y se enfrentará al checo Tomas Berdych, séptimo favorito.

Sin embargo, otros dos españoles, Pablo Andújar y Pere Riba, fueron previamente eliminados por el brasileño Thomaz Bellucci (6-4 y 6-2) y el francés Jo Wilfried Tsonga (6-4 y 6-2), respectivamente.

Verdasco cae ante Yen-Hsun, que se impuso por 7-6(7) y 7-5

Por su parte, el español Fernando Verdasco, decimoquinto favorito, fue sorprendido por el taiwanés Yen-Hsun Lu, que se impuso por 7-6(7) y 7-5 para alcanzar la segunda ronda del Masters 1000 de Madrid.

Lu, 55 del mundo, de 27 años, que jamás ha alcanzado una final del circuito ATP, dio una de las sorpresas de la sesión al acabar con el jugador español, que siempre acoge con grandes expectativas el torneo.

El choque se puso contracorriente para Verdasco, que acusó la pérdida del primer parcial en el desempate.

Después, fue incapaz de evitar que su rival, al que le había superado en el torneo de San José el pasado año, en la única ocasión en la que se habían enfrentado, le rompiera el saque en el undécimo juego del segundo parcial. Eso le costó el partido.