El plante de las seis jugadoras españolas de mejor ránking, decididas a no disputar la Copa Federación al considerar que la Federación maltrataba el tenis femenino, acabó ayer tras una reunión entre las partes en el Consejo Superior de Deportes.

El punto en el que más incidieron, y consiguieron, fue la creación de un Consejo Asesor que comenzará a trabajar en diciembre. Será presidido por José Luis Escañuela y lo integrarán jugadoras, uno de sus técnicos, una ex jugadora, el seleccionador, la responsable de tenis femenino de la FET y un observador del CSD. De este Consejo emanará un Plan Director. En cualquier caso, todo lo acordado allí deberá ser aprobado por la Junta de la Federación o la Asamblea. "Lo importante es que es por cinco años", destacó María José Martínez. "En todos los puntos que reclamamos va a haber mejora. Nos preocupaba el futuro", resumió Nuria Llagostera. Jaime Lissavetzky incidió en que "estructuralmente va a haber una reforma positiva y existirá una planificación también a medio y largo plazo".

Sin embargo, algunas concesiones, como las médicas, están sujetas a que Mapfre siga como patrocinador y todas a la continuidad de Escañuela como presidente. "Si viniera otro, tendría que acabar con los acuerdos expresamente", explicó Xavier Budó, técnico de Carla Suárez, que destacó que "el éxito del acuerdo es del cien por cien". El CSD, además, aportará 16.000 euros "para actividades promocionales de las jugadoras" a los 200.000 ya asignados por la FET este año como inversión extraordinaria.