Tras recibir una cerrada ovación del respetable galo, Federer reconoció que sufrió más de lo esperado para derrotar al raqueta argentino. Incluso tuvo un 5-1 en contra en el tercer set, una situación que llegó a preocuparle si bien nunca temió por conseguir el triunfo.
"Llegué a estar preocupado, pero no temí perder. No me gustó cómo fue el partido durante el tercer set, empecé a flojear. Creí que las cosas estaban bajo control, pero estaba equivocado", admitió el tenista helvético, que tuvo que "cambiar de táctica" para volver a meterse en el partido. "Las cosas no funcionaron, sobre todo en mi resto. Tuve que replanteármelo todo mientras perdía", explicó.
El tenista suizo destacó el buen juego de Acasuso, que nunca le permitió tomar el mando del partido. En esta situación, resultó fundamental su "fortaleza mental y capacidades físicas", aunque lamentó haber permitido que el argentino volviera a meterse en el partido. "No controlé el partido de la manera que me hubiera gustado. No tuve que haberle permitido volver a meterse en el partido", dijo.
De cualquier manera, el helvético agradeció haber tenido que superar las dificultades que presentó el partido, una situación a la que no está acostumbrado. "Siempre he sido muy fuerte mentalmente, pero no me veo en este tipo de situaciones muy a menudo, así que ha sido bueno poder ganar ambos ''tie breaks''", repasó.
Aunque el nivel de juego del argentino al final de la tercera manga fue algo menor que al comienzo del partido, Federer recordó que él también puso de su parte para forzar el desempate. Ya en la ''muerte súbita'', superó de forma clara a su rival, poniendo punto y final a tres mangas "llenas de altibajos". Pero además de la batalla presentada por José Acasuso en el primer tramo del encuentro, el número dos del mundo señaló a las condiciones de la pista como otro de los factores que complicó el partido. "La pista estaba demasiado lenta, había que ser muy paciente y eso quizá haya jugado a su favor".
"Nunca había jugado contra él sobre tierra batida, así que todo ha sido más difícil. Las condiciones eran extremadamente lentas. Incluso llovió al principio. Todo esto tira por tierra cualquier plan de partido", destacó Federer, que finalmente echó mano de su mayor capacidad física y mental para derrotar al argentino.
Precisamente, el suizo señaló esa fortaleza mental como una de sus principales mejoras en los últimos años. "Antes no era tan fuerte mentalmente. Incluso me presionaba demasiado antes de los partidos. Hoy soy mucho más calmado, tengo más experiencia y conozco más a los rivales. Física y mentalmente hoy soy más fuerte", concluyó.
