Dormir bien no es fácil, pero, ¿sabías que conciliar el sueño es aún más difícil el domingo? Dormir es necesario para recuperar energía y, precisamente por eso, si hay un día de la semana en el que es más necesario, ese día es el domingo. Sin embargo, diversos estudios confirman la evidencia: si a ti también te cuesta dormir del tirón el último día de la semana, que sepas que no estás solo.

Según un estudio realizado en Estados Unidos, uno de cada cuatro estadounidenses señaló que la noche del domingo al lunes es la que peor duerme de toda la semana, con mayores interrupciones y desvelos generalizados. Para cuando el sueño vence, ya es tarde… ¡o, mejor dicho, temprano! ¿Por qué el domingo dormimos peor? Analizar las causas nos ayudará a determinar qué tenemos que hacer para evitarlo.

¿Por qué cuesta tanto dormir el domingo?

En primer lugar, el domingo es el día de la semana en el que nuestros horarios ya están totalmente alterados. Aunque nos vayamos a la cama ‘a la misma hora’, la actividad física y mental acumulada del sábado y el domingo es totalmente diferente. En segundo lugar, tras el fin de semana de desconexión, reaparecen los temas pendientes y preocupaciones del día a día. La noche del domingo es el caldo de cultivo perfecto.

En este contexto de anomalía generalizado, hay un denominador común: el ruido. Y no hablamos del sonido físico (aunque no está de mas silenciar las notificaciones o apagar el móvil). Nos referimos al principal emisor de ‘ruido’ mental: tú mismo.

¿Cómo preparar tu cuerpo para el sueño?

En primer lugar, debemos volver a reconciliar nuestro cuerpo con el inicio de la semana. No es necesario que repliquemos exactamente los horarios de la semana en domingo ya que con eso nos estaremos olvidando de los más valioso que nos da el fin de semana: la posibilidad real de desconectar. Podemos seguir con una rutina propia de festivo y, al mismo tiempo, adaptar algunos hábitos que, al final del día, ayuden a nuestro cuerpo a ponerse de nuevo en modo ‘laborable’. Por ejemplo, darnos un baño, leer, no cenar tarde y, sobre todo, dejar ‘listo’ todo lo que tenemos que llevarnos por la puerta al día siguiente. De lo que se trata es de alinearnos con esa parte más rutinaria ya en domingo, para que nuestro cuerpo reconecte de nuevo con la semana.

¿Cómo preparar tu mente para el sueño?

En segundo lugar, hay que ayudar a la mente a entrar en un estado de paz y tranquilidad. Ya vendrá el lunes y tendremos tiempo de resolver los problemas que sabemos que se sucederán. Pero no anticipemos o nuestra mente no tendrá más remedio que intentar encontrar soluciones. La clave: tu cuerpo escucha todo lo que la mente le dice. Así que, si a la hora dormir no hemos bajado revoluciones y seguimos con el mood mente activa, inevitablemente nuestro cuerpo seguirá inquieto y no dormirá.

Ruido mental: cómo poner el off

Una vez tenemos el cuerpo en modo ‘relax’, debemos hacer lo propio con nuestra voz interior y esa cantidad de problemas que está llevándose, literalmente, a la cama. Una herramienta de gran efectividad para neutralizar la agitación mental es la respiración. Debemos buscar unos minutos para relajarnos, para poner orden y paz en nuestra mente. Practicar ejercicios de respiración antes de que el estrés escale hará que relajarnos por la noche sea mucho más sencillo y el sueño nos visite antes y sea de mejor calidad.

¿Quieres dormir como un bebé?

La guía ‘7 días de sueño reparador” está especialmente pensada para todas aquellas mentes inquietas que necesitan regenerarse al 100%, sea el día de la semana que sea. Como hemos visto, aprender a apagar la mente es imprescindible para 'activar' el descanso. Por ello, en este programa de siete días aprenderás a relajar tu mente activa para entregarte al sueño con facilidad.

¿Qué puedes encontrar en este programa?

Te enseñaré cómo integrar cambios en tus hábitos diarios, así como una rutina para la hora de acostarte. Aprenderás cómo ser menos reactivo cuando no puedes conciliar el sueño por la noche y qué hacer con una mente preocupada e hiperactiva. Cada una de las siete sesiones ofrece consejos, trucos y concluye con una rutina de relajación guiada. Además, este programa contiene dos sesiones guiadas de relajación extra.

¿Quién soy?

Soy Mónica Pascual, coach de alto rendimiento para deportistas de élite y empresas. Ayudo a profesionales que quieren aumentar su rendimiento deportivo, aprendiendo a trazar objetivos estratégicos, a ser más conscientes de sus emociones para gestionarlas más y mejor y a mantener el foco mientras compiten. Durante los últimos años de mi carrera he tenido el privilegio de trabajar con doce disciplinas deportivas y he comprobado que hasta los más mejores necesitan que los acompañen por el camino. Cuesta remontar cuando las cosas no salen como esperábamos. Y sí, hay muchos días en los que todo te sobrepasa. Así que te invito a que lo trabajemos juntos a partir de hoy.