Estructura mentalmente el desarrollo de un partido de tenis
Aprende a diferenciar las partes en las que se puede dividir un partido de tenis y optimiza tu rendimiento para aumentar tus posibilidades de ganar.
En cualquier ámbito de la vida, la presencia de un cierto orden nos va a permitir tener las ideas claras y agilizar los procesos en los que estemos inmersos. El caos, sin embargo, nos va a provocar un desconcierto muy perjudicial para nuestros intereses. Por ese motivo, el análisis esquemático y la reflexión nos pueden ayudar a esclarecer nuestras ideas y a tomar las mejores decisiones.
En el tenis amateur, cuando jugamos un partido, jugamos sin prestar mucha atención al desarrollo del encuentro; le pegamos a la bola basándonos en nuestras sensaciones y no nos paramos a analizar en qué situación nos encontramos. Por ese motivo, es una buena idea que identifiquemos las partes en las que podemos dividir un partido de tenis y de qué manera deberíamos actuar en cada una de ellas. De esta manera, podemos definir asimismo una serie de estrategias que pueden marcar la diferencia. A continuación, vamos a ver de qué manera podríamos dividir el transcurso de un partido de tenis:
El calentamiento y los cuatro primeros juegos del partido
En esta primera fase, identifica los puntos débiles de tu rival y juega como realmente sabes. No te preocupes por los errores; intenta desarrollar tu tenis. En los primeros compases de un encuentro, cualquier contratiempo es más sencillo de subsanar que cuando sientes la presión del marcador a partir del octavo juego.
El primer break
Si eres el primero en romper el servicio y abres brecha en el marcador, continúa jugando con la estrategia que te ha hecho llegar hasta ahí. El que debe probar algo nuevo para intentar recuperar la ventaja perdida es tu rival.
En caso de que seas tú el que encaja el break, entonces sí es momento de replantearte tu estrategia para tratar de devolver la igualdad al marcador.
Final del primer set
Si llegas a la recta final del primer set y la situación es muy pareja, aquí la clave está en no fallar. Cuando juegas bajo presión, tomar riesgos innecesarios puede salir muy caro, por lo tanto, afina al máximo tus golpes y espera una oportunidad clara para atacar sin demasiados riesgos y tomar la iniciativa.
Inicio del segundo set
En esta parte del partido no debes dormirte en los laureles bajo ningún concepto. Si has perdido el primer set, debes emplearte al máximo para no empezar por debajo y quedar psicológicamente hundido; si ya tienes un set en el bolsillo, debes estar muy despierto y no confiarte, porque tu rival jugará muy concentrado para tratar de mantener vivas sus opciones.
Break en el segundo set
Las roturas de servicio en el segundo set suelen ser más relevantes que en el primero, ya que el margen de reacción es, por lo general, más reducido. Si vas set arriba y con break de ventaja, puede ser que te tiemble la raqueta cuando pienses que puedes cerrar el partido. Juega con determinación y trata de plasmar el tenis que te ha llevado hasta ese punto. Debes estar también muy atento, porque tu contrincante echará el resto y jugará especialmente agresivo para intentar equilibrar la balanza.
Final del segundo set
Si el último tramo de la primera manga es un momento delicado, el final de la segunda lo es aún más. Aquí puede decidirse el partido y, al igual que en el final del primer, cualquier error de cálculos o precipitación adquiere una mayor relevancia. Por ese motivo, debes jugar con los cinco sentidos en la pista para no regalar ni la hora.
Tercer set
En caso de que cada jugador se haya adjudicado un set, entraríamos de lleno en el tercer parcial. Aquí ya no importa lo que hayas hecho, despeja tu mente y prepárate para jugar tu mejor tenis. Si puedes tomar ventaja al principio para evitar una situación de igualdad en el tramo final del encuentro, las posibilidades de ganar aumentarán considerablemente.
Final del tercer set
En caso de que ningún jugador haya sido capaz de deshacer el equilibrio en el marcador, prepárate para afrontar la recta final del partido con nervios de acero. En este tramo, el miedo a ganar y el miedo a perder pueden alternarse varias veces, en función de cómo se desarrolle esta parte del encuentro. Incluso los jugadores de élite padecen ese miedo, como pudimos comprobar en la final del US Open de este año entre Zverev y Thiem, cuando ambos jugadores se amilanaban sobremanera cuando estaban en disposición de ganar el torneo.
Confía en tu mejor tenis, trata de evadirte de la presión del marcador en la medida de lo posible y concéntrate al máximo en cada golpe que des, porque los errores aquí son definitivos.