La magia del Tenis

Pasión por los cuatro costados

Autor: Carlos Coll Martínez
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Carlos Coll Martínez Twitter

LA MAGIA DEL TENIS

¿Cómo mejoramos la concentración en tenis?

Descubre y aprende las claves más importantes para mantener la concentración y evitar desconexiones mentales que te hagan bajar demasiado tu nivel de tenis.

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Rafa Nadal

Cuando jugamos al tenis, nuestros golpes son los que son; no podemos efectuar tiros que aún no hemos aprendido o practicado (al menos, de manera consciente y controlada). Sin embargo, sí que podemos sacar el máximo rendimiento de los recursos que ya tenemos si conseguimos mantener nuestra concentración el mayor tiempo posible.

En otras ocasiones ya hemos destacado la sideral importancia de la fortaleza mental en el tenis, concepto íntimamente ligado a la posesión de altos niveles de concentración. Por ese motivo, hoy vamos a ver algunos consejos que nos pueden ayudar a que nuestra cabeza no se disperse con tanta facilidad en medio de un partido de tenis.

Cuatro tipos de concentración

Según el psicólogo deportivo Robert M. Nideffer, existen cuatro tipos de concentración:

  • Externa amplia: tras la ejecución de un golpe, percibimos la posición de nuestro rival, la trayectoria de nuestra bola y otros factores relacionados con la situación externa que nos rodea y que pueden influir en el juego.
  • Externa estrecha: en el momento de golpear la pelota, nuestros cinco sentidos están enfocados en la propia pelota para efectuar un disparo lo más preciso posible.
  • Interna amplia: cuando pensamos en estrategias, patrones tácticos y diferentes alternativas antes del partido o durante los descansos.
  • Interna estrecha: en el momento de ejecutar un servicio, cuando visualizamos con qué efecto lo vamos a ejecutar, con qué dirección y con qué potencia.

Aunque el hecho de diferenciar estos cuatro tipos de concentración no es algo determinante, sí que lo es tener la capacidad de poder gestionarlas y alternarlas, dependiendo de la situación en la que nos encontremos.

Aligera tu mente

Es muy importante que te desprendas de todos aquellos pensamientos negativos que puedan empujarte a la desgana y a la apatía; esto influye directamente en tu movilidad y explosividad de piernas y en la colocación.

Si consigues relativizar los errores, centrarte en el célebre concepto "punto a punto", sin agobios y minimizar la presión del resultado, tu rendimiento se incrementará automáticamente. El hecho de pensar demasiado en el momento que no toca puede enredar tu tenis en una telaraña de frustración y autoculpación que no te traerá nada bueno. Cuanto más despejada tengas la mente, mejor podrás concentrarte en desarrollar buenos golpes.

Céntrate

Busca la concentración enfocándote en las soluciones a tus problemas, sin reproches y sin quejas. Si nos quedamos sólo con "¡vaya revés más lamentable!" o "mi volea es de principiante", sin buscar alternativas para salir del atolladero, la crisis irá en aumento. Cuando tenemos esa inquietud por encontrar soluciones, nuestra mente ya está concentrándose automáticamente.

Versatilidad

Si no somos capaces de alternar entre ataque y defensa con fluidez y saber detectar qué toca hacer en cada momento de un encuentro, probablemente no seamos jugadores versátiles.

La versatilidad nos va a aportar confianza en nuestro juego, sabiendo que si algo no funciona, podemos optar por un plan diferente. Ello nos ayudará a centrarnos en aquellos recursos tenísticos que nos pueden venir bien, dependiendo de la situación en la que nos encontremos.

Conclusiones

Nadie dice que contagiarse de esta actitud y no perder los estribos durante un encuentro sea tarea sencilla. Como hemos apuntado en otras publicaciones, es imposible mantener la concentración durante un encuentro completo. No obstante, debemos gestionar esos picos de concentración en los momentos cruciales y contener las emociones negativas y la desidia en los momentos donde la mente está más dispersa y los puntos no transcurren de la manera que nos gustaría.