Susurros del campo

CON EL AVAL DE LA REVISTA TROFEO CAZA

Este blog es un viaje a esas jornadas de caza y conservación, esperamos que seáis nuestros compañeros de cuadrilla.

Autor: Rocío de Andrés

SUSURROS DEL CAMPO

Bienvenidos a Susurros del campo, el blog de caza de AS

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Imagen de un Coto de caza

Este rinconcito es una prebenda que me ofrece As y la revista Trofeo Caza y Conservación y que, sin duda, recojo con la mayor de las ilusiones posibles. Poder expresar y compartir con vosotros, cada semana, lo que es una forma de vida, es todo un reto, harto complicado, y con los nervios, como si el día de antes a una jornada cinegética se tratara, me enfrento a él.

A pesar de llevar casi 15 años (como pasan los años), trabajando por y para la caza, no es sencillo plasmar lo que para mí significa, y más en los tiempos que corren, pero desde luego, voy a poner toda esa ilusión para poder transmitiros lo que esta afición, esta forma de vida, conlleva.

En primer lugar, no puedo escribir la palabra “caza” sin escribir junto a ella otra, “conservación”. Ambas van unidas, pues una sin la otra, no tienen sentido. ¿Con ello a que me refiero? Salir un domingo de caza, con tu perro, ir a una montería, un rececho o cualquier modalidad cinegética que se preste, no es sólo ir con munición y escopeta al hombro, o apretar un gatillo, no, es mucho más. La caza es parte esencial de la conservación del medio. Un cazador disfruta igual en pleno mes de agosto llenando bebederos, dando comida a los animales, cuidando sus cotos, sus especies, vacunando para prevenir enfermedades; es decir, realizando una buena gestión.

Todo cazador que se preste tiene que ser conocedor de donde va a desarrollar la actividad: el entorno, su flora y, por supuesto, la fauna que hay en él. El respeto y amor a la naturaleza, es algo que va implícito por delante de todo. La base de todo ello es un amor incondicional por la naturaleza.

Salir una mañana al campo, impregnarse de aromas, sentir el aire puro en la cara, mirar el monte e infinidad de caprichos inigualables con que la naturaleza nos deleita, es todo un privilegio. Los susurros del campo, esos susurros que, tras muchas jornadas en él, aprendes a interpretar. Cada sonido, cada silencio en la noche… todo tiene un sentido, absolutamente todo.

Pues aquí, una servidora, intentará transmitir, a través de este blog, esos susurros del campo, esos aromas a romero, tomillo, jara… Y espero que, con mi misma ilusión, disfrutéis con los cinco sentidos de esta forma de vida: caza y conservación.