Esfuerzos. El Atlético, en plenitud física, es capaz de ganar a cualquier equipo, como ha quedado demostrado más de una vez. Y se seguirá demostrando. El equipo de Simeone, cuando no juega al ciento por ciento, también puede perder cualquier encuentro. El Atlético jugó en El Molinón después de haber jugado una prórroga y penaltis ante el PSV, con el desgaste físico que esto conlleva. Y en el momento de la verdad, cuando apretó el Sporting, el equipo lo acusó. El Atlético se vio por delante en el marcador y lo fió todo a su fiabilidad defensiva, pero esta vez la cosa no salió como acostumbra. El equipo lleva muchos partidos consecutivos seguidos y ante un rival necesitado y que apretó en un todo o nada, acabó pagando tanto esfuerzo consecutivo. El Atlético jugó el miércoles un partido muy intenso y ayer abrió la jornada liguera. Y luego algunos preguntan porqué los seguidores rojblancos se quejan...
Intensidad. Ganó el Sporting porque lo mereció, porque luchó por el triunfo, porque peleó cada balón como si fuera el último. Y hubo varias entradas de jugadores del conjunto asturiano al límite del reglamento... El colegiado las despachó con amarilla, aunque no siempre ha sucedido igual. Dependiendo de quién esté de por medio en la jugada, la acción merece un color u otro en la tarjeta. No perdió el Atlético por el árbitro. Perdió porque se conformó o no tuvo fuerzas para llegar al área rival con el 0-1 y haber matado el partido. Lo perdió porque no se pueden fallar las contras como las falló el Atlético en el segundo tiempo. El Sporting tuvo esa agresividad necesaria ... permitida por el colegiado. Ayer, cuando algunos jugadores del Atlético cayeron por el suelo por duras entradas nadie se llevó las manos a la cabeza.
Defensa. La Liga está decidida, aunque el Barcelona no lo tendrá fácil hoy ante el Villarreal. Pero aún hay cosas muy importantes para el Atlético en estos dos meses que quedan de temporada. Lo preocupante es la lesión de Giménez y que ahora mismo el Atlético está sin los tres centrales titulares, pues Savic y Godín también están lesionados. Eso es lo peor que dejó el encuentro ante el Sporting. Bendito parón. El Atlético tiene que cargar pilas ahora, descansar y volver a estar físicamente a tope para el encuentro de Champions ante el Barcelona, donde está en juego la temporada. Ahora la mente debe estar en eso y de nada vale lamentarse por la derrota en El Molinón.
Críticas. Lo fácil sería criticar a esta plantilla que tantas alegrías ha dado a la afición rojiblanca. El Atlético llevaba sin perder desde el 30 de enero, cuando perdió en el Camp Nou. Desde entonces ha jugado diez partidos y ha sido en el décimo cuando conoció la derrota. Ganar es bonito y los aficionados atléticos se han acostumbrado a ello, pero entendamos que también se puede perder, que también los nuestros son humanos, que también el rival se juega la vida... Casi ningún jugador del Atlético estuvo a su nivel habitual y por eso el Sporting le pudo dar la vuelta al partido.
La afición. Unos 1.200 aficionados del Atlético estuvieron ayer en Gijón y el club ya ha vendido casi 10.000 entradas para el choque de Champions del Calderón ante el Barça. Un dato que muestra cómo está la afición de orgullosa de este equipo. Y una derrota no empaña lo realizado hasta ahora, aunque debe servir para apretar los dientes de cara al futuro. Olvidemos el partido y arropemos a una plantilla ahora agotada. Bendito parón.