NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Bernardo Ruiz, el decano de nuestros mayores, cortó la tarta

El 29 de abril de 1935 arrancó la primera Vuelta a España de la Ronda de Atocha con 50 ciclistas… Y el 29 de abril de 2015, la actual Vuelta a España celebró su 80 cumpleaños en la Casa de Campo de Madrid, el mismo lugar que había recibido la última etapa en aquella lejana edición con 100.000 aficionados que animaron a los 29 corredores sobrevivientes. El pasado miércoles fuimos bastantes menos, unas 150 personas: muchos exciclistas, pero también patrocinadores, instituciones, periodistas… Suficientes para pasar un reencuentro agradable.

Ampliar


El acto comenzó con un paseo en bicicleta muy retro de tres kilómetros por la Casa de Campo, con bicicletas y maillots de época… Hubo hasta caídas bajo la pancarta de salida: Jaime Mir rodó por los suelos a sus 86 años.


-No pasa nada, la puñetera falta de costumbre.


Su accidente me recordó a una de las múltiples anécdotas que me contó una vez el bigote más famoso del ciclismo. En sus tiempos de actor, cada caída desde el caballo en los spaguetti western se pagaba por separado. Los más experimentados sabían cómo montárselo para caerse varias veces fuera de cámara. Así cobraban más: “No convenía hacerlo bien a la primera, porque te llevabas menos, pero tampoco abusar, porque entonces no te volvían a llamar”. Por cierto, corre la voz de que Jaime Mir hizo porno, pero en realidad eran las películas de destape del comienzo de la democracia.

Ampliar


Jaime Mir nació el mismo año que Federico Martín Bahamontes (1928), que también posó para la foto, aunque declinó participar en el festivo paseo de la Vuelta, una carrera que no pudo ganar, como bien se encarga de recordar a menudo el propio Águila de Toledo:


-Me la robaron, me atacaban mis propios compañeros, tenía que ganar Loroño… Pero yo fui pionero en el Tour de Francia, la más grande, y en Toledo me recibió más gente que a Franco… Que nadie lo olvide.



Ampliar

Sin embargo, ni Bahamontes ni Mir fueron los decanos de la celebración, sino Bernardo Ruiz, alicantino de Orihuela (ahora residente en la vecina Torrevieja), que sí ganó la Vuelta en 1948 y que fue pionero del ciclismo español en muchas cosas: primer podio nacional en el Tour (1952), primer triunfo de etapa en el Giro (1955), primero en ganar más de dos etapas en el Tour en una misma edición (1952)… Bernardo Ruiz tenía 10 años cuando la Vuelta nació en 1935: “La vi pasar por mi pueblo”. A sus 90 años actuales, don Bernardo Ruiz paseó con su bastón por la sala que acogió la fiesta, rodeado de ciclistas de muchas generaciones, y atendió amablemente a las múltiples preguntas de los medios de comunicación:


-¿Aquella Vuelta que pasó por su pueblo influyó para que se dedicara usted al ciclismo?
-Sí, yo veía todas las carreras que pasaban por Orihuela, me gustaban mucho…
-¿Y cómo empezó usted en el ciclismo?
-¡Ay! Empecé trabajando con la bicicleta… Pero esa es una historia muy larga para contar ahora.

Igual que don Bernardo vio pasar a aquellos ciclistas por su pueblo en 1935, otros muchos lo hicieron después. La Vuelta a España siembra semillas a su paso.


-Me encanta juntarme con mis mayores, con Bernardo Ruiz, con Bahamontes, con Tamames… Cuando los veo, me doy cuenta del mucho ciclismo que me he perdido.


Quien habla así es Pedro Delgado, ganador dos veces de la Vuelta a España (1985 y 1989) y de un Tour de Francia (1988). Perico, ahora voz del ciclismo en RTVE, también estuvo en la conmemoración. Y Agustín Tamames, campeón de la Vuelta en 1975. Y Angelino Soler, vencedor en 1961 con 21 años. Y Álvaro Pino, triunfador en 1986. Y Carlos Sastre, ganador del Tour 2008. Y Escartín. Y Txomin Perurena. Y Laiseka. Y Anselmo Fuerte. Y Santi Blanco. Y De Santos. Y Luis Pérez. Y Suárez Cueva. Y López Cerrón. Y el alcaldable Martín Perdiguero. E Iglesias. E Igor González de Galdeano… No eran todos los que son, ni mucho menos, pero sí bastante representativos.

La fiesta continuó con los parlamentos, que se siguieron con dificultad… ¡Ay, Javier Guillén! ¡Qué complicado es guardar silencio y atención cuando nos has juntado en una misma sala a un montón de gente que hace años que no nos vemos! Fue una fiesta “en familia”, como apuntó el propio Guillén. Luego vino la comida, los corrillos… Y la tarta de celebración de los 80 años que cortó Bernardo Ruiz. El más veterano de nuestros mayores. Historia de la Vuelta.