El diluvio de Purito
Andaba yo disfrutando por fin de unos días de vacaciones después de un verano duro (y pleno) de trabajo… Y andaba yo por un lugar de poca cobertura y sin apenas señal televisiva, cuando de repente recordé que se estaba celebrando el Giro de Lombardía… Twitter me ofrecía toda la información, pero la imagen es la imagen. Así que barajé dos posibilidades: o arranco el coche y me voy al pueblo de al lado en busca de un bar con Eurosport, o intento conectar el pincho al ordenador a ver si tengo suerte… Me decanté por esta segunda opción, que tan pocos resultados me había dado otras veces, y ¡bingo!: el pincho destella en color azul y aparece la Gazzetta TV con una resolución brutal… Lombardía.
El diluvio que caía en Lombardía y que nos impidió a todos ver el momento del ataque de Purito Rodríguez ya es otra historia, pero sí pudimos disfrutar del final de una carrera dantesca, con frío y lluvia… El otoño ciclista. Por algo se la llama ‘La clásica de las hojas muertas’. El catalán arrancó en la última subida, Villa Vergano, y logró mantener una distancia en torno a siete segundos hasta la meta de Lecco. Al ímpetu de Purito se añadió la falta de entendimiento de los perseguidores, entre los que se encontraba Alberto Contador. Nada que no suela ocurrir en las clásicas, por cierto. Hay que ser valiente y aprovechar el momento.
Samuel Sánchez entró en segundo lugar y sumó así su ¡cuarto podio! en Lombardía: ya había sido segundo en 2006 y 2009, y tercero en 2007. Además del asturiano, también habían visitado el cajón otoñal el pionero Miguel Poblet (2º en 1958 y 3º en 1959), Marino Lejarreta (3º en 1988), Pablo Lastras (3º en 2010) y el propio Purito (3º en 2011). Pero desde su nacimiento en 1905, ningún español había ganado esta clásica hasta alcanzar hoy su 106ª edición. Una vez conquistadas la Milán-San Remo, la Lieja-Bastoña-Lieja y Lombardía, ya solo quedan París-Roubaix y Tour de Flandes para completar los cinco monumentos. ¿He dicho “solo”? Quería decir “ni más ni menos”.
Al margen de cuestiones estadísticas, sabíamos que la edición de 2012 era propicia para asaltar Lombardía. La baja de última hora por gripe de Alejandro Valverde hizo perder una gran bala, pero muchos apuntábamos más a Alberto Contador, al que vimos ganar el miércoles en la Milán-Turín y lucir en el Mundial de Valkenburg. La verdad es que al ganador de la Vuelta a España se le ha hecho corto este final de temporada.
Fue Purito, sin embargo, quien cerró con su victoria una temporada excepcional. “Esta es la mejor victoria de mi vida y acabo así un año perfecto”, dijo el catalán en la meta. Un año tan perfecto que le aúpa al número uno del ranking mundial del WorldTour (por segunda vez en su carrera, ya lo fue en 2010), donde desbanca in extremis a Brad Wiggins. Para mí el británico es el mejor de la campaña, pero eso no es óbice para destocarse ante el temporadón de Purito: Flecha Valona, Giro de Lombardía, 2º en el Giro (más dos etapas), 3º en la Vuelta (más tres etapas), una etapa en la Tirreno-Adriático y dos en el País Vasco. En total, diez victorias, todas en el WorldTour… Un purazo este Purito.