Asafa Powell ha retornado a la pista cubierta y lo ha hecho con victoria en el US Open del Madison Square Garden neoyorquino, una instalación mítica. Venció con 5.64, lo que coloca en puesto décimo sexto del ránking mundial de todos los tiempos. Una marca que no resulta espectacular, pero que no es mala. Tres centésimas por detrás entró el también jamaicano Nesta Carter; ercero y cuarto fueron los estadounidenses Trell Kimmons (5.68) y Justin Gatlin (5.71); quinto entró Kimmari Roach (5.74), compatriota de Powell, y sexto Donovan Bailey (5.75), de Antigua.
Powell reaccionó al disparo en 132 milésimas de segundo y fue el cuarto en despegar de los tacos, tras Kimmons (110), Bailey (128) y Carter (131), y por delante de Gatlin (152) y Roach (155). Por cierto, este último atleta, el menos conocido de la competición, es un jamaicano de 21 años (cuumple 22 el 21 de septiembre) y está acreditado en 10.13 en los 1900 metros, desde 2010. El año pasado hizo una centésima más.
Es curioso que los jamaicanos Usain Bolt y Asafa Powell y el estadounidense Tyson Gay, los tres mejores corredores del ránking mundial de todos los tiempos en 100 metros (que se reparten las 18 marcas más relevantes), no se hayan sentido nada atraídos por la pista cubierta.
Bolt, récordman mundial con 9.58, jamás ha competido bajo techo, que se sepa, y nunca ha mostrado el más mínimo interés en hacerlo. ¿Podría ser campeón indoor y batir el tope mundial? Probablemente sí, de acuerdo con los parciales que consigue camino del hectómetro, pero…
Tyson Gay, segundo hombre más veloz de la historia, con 9.69, ha hecho alguna escaramuza en pista cubierta, pero nunca ha acudido a una gran competición en esta modalidad. Tiene 6.55 en 60 metros (2005), 20.58 en 200 (2004) y 47.08 en 400 (2007).
Por su parte, Powell, tercer hombre de las listas de los 100 metros, con 9.72, está acreditado en 6.56 en pista cubierta (2004) y es el único que ha competido en unos Mundiales, los de Budapest, en ese mismo año. Llegó a las semifinales, en las que fue quinto con 6.71.
¿Por qué los tres hombres más veloces actualmente al aire libre no se han sentido atraídos por la pista cubierta? ¿No se han visto capaces para ser, también en ese terreno, los mejores? Yo creo que sí podían haberse coronado, porque los tres son capaces de correr muy rápido esos primeros tramos de los 100 metros. Sólo hay que recurrir a los parciales que han hecho en algunas de sus carreras más emblemáticas.
Recuerdan a Carl Lewis, que nunca sintió atracción por la velocidad indoor, aunque, en el caso del Hijo del Viento, sus posibilidades de ser mejor en los 60 metros en pista cubierta eran remotas. Él, evidentemente, no tenía explosividad suficiente.
Con la comparación del ránking de los diez más veloces de todos los tiempos en 60 y 100 metros llegamos a algunas conclusiones curiosas:
1. El más completo es el estadounidense Maurice Greene: quinto de todos los tiempos en el hectómetro (9.79, en 1999) y plusmarquista mundial indoor (6.39, en 1998 y 2001).
2. Sólo otro atleta, el canadiense Bruny Surin, figura en ambos top ten: noveno al aire libre (9.84, en 1999) y quinto bajo techo (6.45, en 1993).
3. Los diez mejores de los 100 metros consiguieron sus marcas personales hace 6,9 años de promedio, mientras que las de 60 metros tienen una antigüedad de 12,8. Es decir, que al aire libre ha existido una mayor renovación que bajo techo.
Otro juego estadístico curioso: ¿Cuántos atletas medallistas en los Mundiales de 60 metros en pista cubierta consiguieron subir al podio al verano siguiente, en Mundiales al aire libre o en Juegos Olímpicos, según correspondiera?
Pues muy pocos. Bruny Surin fue campeón indoor en Barcelona 1995 y plata en los Mundiales al aire libre de ese mismo año, en Gotemburgo; Maurice Greene venció en sala en Maebashi 1999 y al descubierto en Sevilla, en esa misma temporada, y Kim Collins fue plata en el Mundial indoor de Birmingham 2003 y campeón al aire libre en París.
Es decir, que aunque la teoría diga que preparar la pista cubierta y el aire libre no es incompatible, la realidad estadística no lo refleja, pero más por ausencia de las grandes figuras en los Mundiales en sala que por haber sido derrotados en ellos.
DIDAC Y ANA, JÓVENES QUE PROGRESAN
Me supone especial alegría comentar las plusmarcas españolas que se baten en las categorías menores. Esta vez hay que reseñar el récord español júnior del catalán Didac Salas en pértiga y los dos topes juveniles de la gallega Ana Peleteiro. El discípulo de Hans Ruf Giménez superó 5,40 en Valencia y añadió cinco centímetros a su récord anterior. La alumna de Abelardo Mouré llegó en A Coruña a 12,80 y posteriormente a 13,04, pulverizando su plusmarca nacional, que estaba en 12,70 metros. Las buenas noticias nunca sobran y si son entre gente joven, menos.
ALEKSEY DMITRIK, 2,35 EN ALTURA
El ruso Aleksey Dmitrik, plata en los Mundiales de Daegu 2011, ha saltado 2,35 metros en Hustopece (República Checa), mejorando en un centímetro su mejor marca en pista cubierta. Intentó 2,41 y estuvo a punto de saltarlo. Al aire libre tiene 2,36. Otros cuatro atletas saltaron 2,31: los rusos Andrey Silnov e Ivan Ukhov, el británico Oni Samson y el checo Jaroslav Baba.