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Nadal da el susto ante la prensa y Djokovic baila en la central

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Tomás de Cos

La tercera ronda del US Open ha dejado dos grandes anécdotas que parecen simbolizar el diferente estado por el que atraviesan los dos colosos del tenis mundial. Pero la película no acaba hasta el próximo día 11 de septiembre, cita en la que esperamos asistir al sexto duelo entre ambos en este 2011.

El defensor del título sacó adelante un partido trampa ante Nalbandian con dosis de buen tenis, mucho oficio e intensidad física. Un triunfo en tres sets (7-6, 6-1 y 7-5) que amplía la confianza del balear de cara a su próximo duelo con el luxemburgués Gilles Müller (2-1 en el cara a cara para Nadal), y que fue ensombrecido por la gran anécdota de la jornada, cuando sufrió un calambrazo en la sala de prensa (Vídeo) que le hizo retorcerse de dolor ante la mirada atenta y preocupada de cámaras y periodistas. Unas imágenes que han dado la vuelta al mundo.

Antes Nadal evidenció que sigue sin encontrar la tranquilidad mental que le convirtió en un tenista inexpugnable el pasado 2010, pero que está en el buen camino. Ante el talentoso ‘Rey David’, manejó todas las claves de su tenis: intensidad, agresividad con su derecha liftada, seguridad (sumó solo 18 errores no forzados en tres sets), ritmo, consistencia y una velocidad de piernas formidable. Eso sí, por momentos se alejó de la línea de fondo y se vio obligado a remontar en el primer y el tercer set. Pero es que el rival no era un cualquiera.

Nalbandian ha sido una de las bestias negras de Federer, a quien ha ganado en ocho ocasiones, entre ellas la final de la Masters Cup de 2005 y de Madrid 2007, y es uno de los tenistas con más facilidad que ha visto el deporte de la raqueta. Un tenista genial con una carrera lastrada por el físico y que mereció ser mejor. Por todo ello tampoco cabía esperar un paseo de Nadal.

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El balear supo enderezar el primer set en el décimo juego, tras haber encajado una rotura en el quinto, y recobró la frescura mental a tiempo para anotárselo en el desempate. Una demostración de su irreductible espíritu de lucha y de lo consciente que era Rafa del papel psicológico de la primera manga del choque frente a un rival mucho más débil en el plano físico. Un triunfo parcial que fue un portazo en la cara de Nalbandian, que tardaría un set en reponerse. Y para entonces Nadal ya se había metido en el bolsillo el segundo parcial por un demoledor 6-1.

Ya con todo perdido y el aliento recuperado, el cordobés, amante de los rallies e hincha de River Plate, volvió a oponer resistencia al balear. Rompió el primer servicio de Nadal, que sin embargo no estaba dispuesto a despilfarrar más energías de las necesarias y se colocó con un cómodo 5-2. Pero a la hora de finiquitar el partido, volvieron las dudas (malgastó un 5-3 y servicio encajando el tercer break) y el español tuvo que acudir al descabello para finiquitar la faena: 7-5.

En el haber de Nadal queda el recuerdo de una victoria solvente en un partido muy duro, con un buen control de la situación y buenas sensaciones sobre la pista. En el debe, algunas dudas en el cierre del choque y algunos kilómetros de más sobre la abrasiva resina de la Arthur Ashe.

Mientras, Djokovic sigue sobre la cresta de la ola y explotando su lado más mediático. Tras los divertidos momentos protagonizados durante su monumental paliza a Berloq, y en contraste con el susto protagonizado por Nadal en su accidentada rueda de prensa, el serbio celebró su sexagésimo triunfo del año dedicando un bailecito al rendido respetable (Vídeo) tras apear a Davydenko por un contundente 6-3, 6-4, 6-2. El vídeo tampoco tiene desperdicio y es que aunque a muchos les caiga regular tirando a mal, ‘Nole’ es una bocanada de aire fresco para el tenis por su espontaneidad y gracia natural, que recuerda el espíritu de ilustres como Connors, Leconte o Noah.

La jornada dejó además el triunfo de Ferrer ante Mayer (6-1, 6-2 y 7-6), que se medirá con Roddick; la eliminación de Feliciano López frente a Murray (6-1, 6-4, 6-2) y el adiós prematuro de Del Potro, campeón del 2009, víctima de las constantes emboscadas del francés Simon (4-6, 7-6, 6-2, 7-6). Hoy buscan los cuartos de final Ferrero y Carla Suárez, que van mejorando de las ampollas y los vómitos, frente a Tipsarevic y Petkovic.