Lección de tenis y título de campeón del ATP Tour 2009
Tomás de Cos
Si en la primera jornada dejó algunas dudas, en el segundo las despejó todas. Tremenda exhibición de tenis de Federer ante Murray, que le coloca virtualmente en las semifinales, además de proporcionarle 400 puntos que le aseguran mantener el cetro mundial del deporte de la raqueta hasta la temporada 2010.
El suizo, que hizo una gran lectura del partido, sacó el genio que lleva dentro para dar un tremendo repaso al ídolo local, Andy Murray. Un chaparrón de juego similar al que ahogó en su día al escocés en la final del US Open 2008. Una lección magistral en el segundo y tercer set, en la que mostró todo su repertorio de golpes y jugadas para buscar los puntos por la vía rápida y no caer en el ritmo endiablado del escocés.
Tras perder la primera manga (3-6), mejoró el servicio y arriesgó más. Restó dentro de la pista, quitándole la iniciativa a Murray; buscó con insistencia los tiros paralelos para restarle tiempo de reacción y encontró winners de toda índole: de resto, de derecha, de revés, de dejada, con la volea. Pasó de entrar en largos peloteos en los que siempre salía victorioso Murray a no repetir más de dos tiros y vivir montado de la pelota en buscar del golpe definitivo. De defenderse con uñas y dientes, a desempolvar su mejor arsenal de ataque.
Recordó a Rossi lanzado a tumba abierta, a Schumacher esquivando doblados, a Jordan finalizando contraataques, a Zidane encontrando líneas de pase o a Maradona inventando jugadas imposibles. En definitiva fue el mejor retrato de sí mismo, del niño pródigo que reinventó el tenis acudiendo a los clásicos. Veremos si mantiene el nivel y se alza con el que sería su quinto título de ‘maestro’. Talento y clase le sobran, pero eso no es nada nuevo.
Verdasco, virtualmente eliminado
Aunque aún le queda una opción bastante remota, Verdasco dijo ayer prácticamente adiós a la posibilidad de clasificarse para las semifinales del ATP Finals 2009. Para ello casi deben alinearse tres o cuatro astros en la última jornada del grupo A. Sus opciones pasan por ganar con autoridad a Murray (en dos sets y con un claro marcador favorable) y que Federer se imponga a Del Potro. Necesita un milagro, vamos.
Pero el madrileño puede irse muy orgulloso de su debut en la competición. Ha caído con honor frente al número uno y el cinco del mundo arrebatándoles un set en ambos encuentros. Un pequeño pasito más en su proceso de adaptación al recreo de los mayores. Verdasco siempre ha necesitado un tiempo de respiro antes de afrontar el siguiente escalón. Ante Del Potro volvió a demostrar que su juego le permite disputar de tú a tú con cualquier top ten, pero también evidenció que mentalmente todavía está claramente en desventaja.
Ante un irregular Federer no supo dar carpetazo a un encuentro que tenía más que bien y frente a Del Potro levantó dos bolas de partido, remontó un 5-2 en el tercer set y se hundió en el tie break. Al de Tandil, por el contrario no le tembló el pulso, aunque bien es cierto que los jugadores con un estilo más agresivo y mejor servicio siempre tienen más opciones de resolver a su favor los juegos decisivos.