NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

A vueltas con el estado de Rafa

Ampliar

Tomás de Cos

La ausencia de Nadal ha sido en España la noticia más relevante de este Wimbledon 2009. Nada ha preocupado más a los aficionados y nada ha sido tampoco más comentado aquí en MatchBall. Es por ello que hemos querido saber algo más sobre los aspectos físicos y psicológicos de la lesión que el número uno padece en ambas rodillas.

El doctor González, traumatólogo y médico de cabecera de AS, habla muy claro del tema. “Me encanta Nadal, le sigo y hace tiempo que vengo avisando que podía suceder lo que por desgracia ha ocurrido”, afirma antes de explicar la dolencia del balear.

“Rafa Nadal sufre una inflamación de los tendones cuadricipitales de ambas rodillas, con afectación ósea del polo superior de la rótula. Eso significa que en este momento sus tendones están tirando mucho de la rótula y le están provocando un fuerte dolor”. “Se trata de una lesión crónica que no le deje competir al 100%”, comenta.

La fortaleza física de Nadal es uno de los grandes pilares de su éxito, que no el único, y sus problemas han provocado que su tenis se resienta de forma notable. “El balear es un jugador con un potencial muscular enorme, que realiza habitualmente bruscas arrancadas y frenadas, lo que evidentemente repercute en los tendones. Desde el punto de vista físico el juego de Nadal es agresivo, de ataque. Por lo que, si físicamente no está bien -porque sus rodillas no le responden-, su juego se vuelve defensivo”, argumenta.

“Este tipo de lesiones por sobrecarga, por sobre uso, por estrés, por fatiga… son difíciles de curar cuando se está competiendo de forma continuada. Es muy difícil que sólo con masajes, ultrasonidos y demás terapias, se pueda superar por completo. El descanso es imprescindible para conseguir una total recuperación”, sentencia. “Por duro que fuera, Nadal tenía que parar de competir”, dice rotundo.

Resulta cuando menos curioso que el Dr. González coloque el acento en una anécdota muy comentada en este blog a raíz de una foto de Rafa rebozado en tierra batida tras perder el equilibrio en un lance de su encuentro contra Soderling. “Estuve viendo el partido con un colega y me llamó la atención el momento en el que Nadal se cayó al suelo por una descoordinación neuromuscular”.

“Ese incidente demostró que no estaba bien físicamente y que se vio obligado a jugar de un modo defensivo, esperando el error del contrario. No podía arrancar, ni frenar bruscamente, lo que resta mucha confianza a su tenis”, concluye.

El Dr. González no rehusó tampoco a dar su opinión en el ardiente debate sobre el futuro de Nadal. “Al contrario que otros tenistas con menos problemas osteotendinosos, como puedan ser Agassi o Federer (por las características de su tenis), Nadal es pura potencia. Para que su carrera profesional dure mucho tiempo se requiere que esté controlado. Y afortunadamente lo está. Se trata de conseguir afinar al máximo el binomio descanso-competición”, finalizó.

En la misma línea se posiciona Pablo del Río, psicólogo deportivo del CAR del CSD y que recientemente ha comenzado a colaborar con Feliciano López.

“En Nadal se ha visto un gran cambio de actitud en los últimos meses. Decía y hacía cosas que no eran lo habitual y luego las corregía, se desdecía… Eso denota que su estado emocional está alterado. La lesión evidentemente tiene que ver. Tener que competir con dolor es algo estresante y afecta invariablemente al estado mental del deportista”, afirma.

“Es posible que lleve tanto tiempo arrastrando esas molestias, que eso le haya generado un enorme desgaste psicológico. Que esté quemado. Y contra eso lo mejor es parar. Ni Copa Davis, ni nada. Parar y descansar física y psicológicamente”, explica. “Estando mal es posible aguantar uno, dos o tres torneos, pero no más”, continúa.

“Si anímicamente estás bien, el dolor físico se sobrelleva mejor. Pero cuando anímicamente no lo estás, esas molestias se acrecientan. Son esas ‘sensaciones’ negativas del jugador de las que hablaba el Dr. Cotorro...”, que pueden hacer pensar que hay más cosas que la tendinitis revoloteando por su cabeza.

Por último, Pablo del Río muestra una gran preocupación por la capacidad del circuito para fagocitar tenistas. “Rafa lleva mucho tiempo compitiendo al máximo nivel y encontrarndo en cada torneo una nueva oportunidad de ganar. Pero eso conlleva mucha presión y el calendario es muy duro. Demasiado. Si la ATP no hace algo, nos podemos encontrar con jugadores totalmente quemados a los 25 años”, denuncia.

Parece claro que Nadal va a tener que empezar a cuidarse un poco más y a meter bastante la tijera en su calendario de competición. De momento, las vacaciones de las que ahora disfruta, se las tenía bien ganadas después de su increíble inicio de temporada. Muy pronto volverá a provocar gestos de incredulidad en todos nosotros. Mucho ánimo.