Llega el partido que nadie quiere jugar, tras la decepción de caer en semifinales. Suelen ser abiertos, con varios suplentes y muy divertidos.
Es cierto, pocos tienen motivación después de acariciar algo tan bonito como una final mundialista. Pero hay algunos que sí: los delanteros.
Ayer, durante una rueda de prensa realmente bella, Antoine Griezmann me hizo llorar y me hizo sentir veinte años más joven
Francia debe asumirlo: la mayoría de seguidores neutrales quieren que Croacia gane el Mundial. El joven país europeo despierta gran simpatía.
Dos equipos que aspiraron a todo, Inglaterra y Bélgica, se enfrentan hoy por nada
En el último entrenamiento previo a la semifinal Croacia-Inglaterra, Gareth Southgate sorprendió a sus jugadores con un trabajo especial.