Desde hace un tiempo se supone que LaLiga vive una realidad estricta, bajo el brazo inflexible de Javier Tebas y su gran controlador económico, Javier Gómez.
PorAlfredo Relaño
Jesús Balseiro
EFE
Moisés Llorens
Moisés Llorens
Desde hace un tiempo se supone que LaLiga vive una realidad estricta, bajo el brazo inflexible de Javier Tebas y su gran controlador económico, Javier Gómez.