Todos tenemos nuestro propio Amavisca, ese jugador de tu equipo que te lleva a una época determinada, laxa y eterna al mismo tiempo, en la que te aficionaste para siempre al fútbol.
PorJavier Aznar
Raúl Izquierdo
Todos tenemos nuestro propio Amavisca, ese jugador de tu equipo que te lleva a una época determinada, laxa y eterna al mismo tiempo, en la que te aficionaste para siempre al fútbol.